Después de la cancelación de las estancias infantiles, la de los albergues para dar protección a las mujeres violentadas, ahora se cancelan de manera oficial las Escuelas de Tiempo Completo.
Los dejan sin opciones
Esto en verdad es una tragedia para más de 3.6 millones de estudiantes y sus familias. Si cuando salen de la escuela los niños y niñas sus padres trabajan, los menores se quedan solos.
Les voy a contar una historia que me tocó cubrir como reportera.
Altán, competencia sucia en celulares
En el 2009, cuando Ciudad Juárez se puso muy complicado en temas de seguridad, cuando se asesinaban niñas, adolescentes y mujeres, y se exponenció el tema de las muertas de Juárez, hicimos un reportaje que me marcó el alma.
La inseguridad se había gestado años antes, cuando muchas familias se mudaron a Ciudad Juárez; los hombres cruzaron la frontera para trabajar en Estados Unidos y las madres se quedaron solas con sus hijos.
Ellas salían todo el día a trabajar a las maquiladoras, los más chiquitos se quedaban en casa, algunas veces los amarraban para que no se salieran, otros iban solos a la escuela, y de regreso se quedaban en las calles. Sus madres trabajaban en las maquiladoras para poderles dar de comer. No los podían vigilar.
Con esos niños en la calle, se empezaron a formar las pandillas. Los líderes de las pandillas acogían a los menores que no tenían vigilancia alguna, porque sus madres tenían que trabajar y los hacían parte de su estructura.
Así sucedió en gran parte del país: el crimen empezó a buscar menores que estuvieran en las calles solos y sin supervisión.
Cuando se hacen las Escuelas de Tiempo Completo, la vida de millones de niños y niñas cambió.
Las mamás los podían dejar en la escuela, muchas veces desayunaban ahí, terminaban sus clases, comían y luego hacían deporte y tareas. Cuando llegaban a su hogar ya estaban con sus familiares para platicar y dormir.
Así se recuperó la seguridad en Juárez. Pongo el ejemplo de Juárez porque trabajé el tema en ese lugar, pero así sucedió en muchos otros sitios del país que tuvieron escuelas de tiempo completo.
Por cierto, los índices de accidentes en el hogar, como quemaduras, bajaron muchísimo cuando los niños pasaban más tiempo en la escuela que solos en su casa.
Se trabajó en el tejido social, se hicieron albergues para combatir las adicciones y rescatar a pandilleros que peleaban para vender drogas y así cubrir sus dosis.
Y muchos niños en la escuela encontraron un lugar seguro, se les vigilaba, se les daba de comer, se les enseñaba la disciplina del deporte.
Pero todo lo que hubo en el pasado, sin importar qué tanto bien le hacía a la sociedad, ha sido eliminado por la actual administración.
Este lunes 28 de febrero se hizo oficial el fin del Programa Escuela de Tiempo Completo (PETC), mediante la publicación del Acuerdo 05/02/2022 en el Diario Oficial de la Federación (DOF), donde la Secretaría de Educación Pública (SEP) publicó las reglas de operación para el programa La Escuela es Nuestra (LEEN).
Los estudiantes se quedan sin ese programa y al magisterio se le quitan esos recursos de los cuales dependían no sólo directivos y maestros, también conserjes y cocineros.
¿Qué más importante puede haber que destinar recursos para estos programas que cambian para bien la vida de tantas familias?
Hasta que las eliminaron, había 27 mil planteles en todo el país, la mayoría en zonas indígenas y de alta marginación. Desde el año pasado ya no contaban con recursos debido a que ya se tenían contemplados los cambios.
Hasta noviembre de 2020, en medio de la pandemia por Covid-19, el anterior secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma, había garantizado la continuidad del programa de escuelas de tiempo completo, porque el propio funcionario sabía de la importancia que era atender a esos menores.
El programa de Escuelas de Tiempo Completo tuvo sus inicios en 2007. Comenzó como una propuesta pedagógica innovadora, cuyo objetivo era generar ambientes educativos propicios para ampliar las oportunidades de aprendizaje y el desarrollo de competencias de los alumnos, conforme a los propósitos de la educación pública básica.
Con el paso de los años, los objetivos del programa se modificaron, agregando nuevas metas; la formación de valores, el desarrollo de competencias y aprovechamiento óptimo.
Estas escuelas que sirvieron para abatir la desnutrición y fortalecer el tejido social de la población, se han quedado sin presupuesto.
Desde el Presupuesto de Egresos de la Federación 2021 quedó afuera el programa Escuelas de Tiempo Completo, que daba atención a los alumnos de nivel básico en horarios extendidos.
Hay pocos recursos que se distribuyen de forma discrecional a algunas escuelas, de acuerdo a criterios que no corresponden con las necesidades de cada una, como la matrícula escolar.
La UNICEF indicó que esta eliminación presupuestal generaría una problemática relacionada con la evaluación y calidad, con la educación básica que es inicial, la de formación para todo menor de edad y para las poblaciones en situaciones de vulnerabilidad.
Además, indicó que las Escuelas de Tiempo Completo contribuían al acceso efectivo de tres derechos: alimentación nutritiva y de calidad, educación y no discriminación, al tiempo que incrementaba el bienestar económico de muchas familias.
No todo lo implementado en las Escuelas de Tiempo Completo era perfecto, se necesitaban ajustar algunas tuercas para que el programa tuviera un progreso, pero mejor se eliminó de tajo, violando los derechos humanos de muchos menores y de sus familias.