Protestas

Abre FGJ seis carpetas de investigación por saqueos

El vocero de la dependencia detalló que la Fiscalía respeta el derecho a la libre manifestación, pero no tolerará actos delictivos

Manifestación
Manifestación
Por:
  • Karla Mora

Derivado de las denuncias presentadas por representantes legales de los negocios vandalizados y saqueados durante la protesta de jóvenes encapuchados la tarde del lunes, la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México abrió seis carpetas de investigación para dar con los responsables.

El vocero de la dependencia, Ulises Lara, detalló en conferencia de prensa que la Fiscalía respeta el derecho a la libre manifestación, pero no tolerará actos delictivos.

Detalló que la Policía de Investigación “cuenta con información e imágenes, tanto fotográficas como en video, de personas que posiblemente participaron en los saqueos”.

Por estos hechos, la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco-Servytur) de la Ciudad de México detalló que las pérdidas provocadas por las protestas del lunes, así como la del viernes de la semana pasada, en la capital, ascienden a 22 millones de pesos.

Sobre esta protesta, también se pronunció la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, quien señaló que los embozados tenían la intención de generar represión por parte de la policía, pero aseguró que “se quedaron con las ganas” y reconoció la actuación policial.

“No hubo represión, eso era lo que buscaban y no lo tuvieron, porque estamos construyendo una policía que haga su trabajo frente a la delincuencia, y también que respete los derechos humanos; y que frente a estos actos que tienen un presunto halo de protesta social, también sepan cómo actuar”, dijo.

Sobre quiénes están detrás de las movilizaciones, afirmó que a su administración no le corresponde hacer una investigación policiaca al respecto; asimismo, descartó que los jóvenes sean anarquistas, aunque así se hagan llamar, pues carecen de los ideales de esa escuela de pensamiento.

La mandataria negó que haya riesgo de crisis al interior de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) por el desacuerdo de algunos uniformados que han manifestado su inconformidad con la actuación del Gobierno, en cuanto a su protección.