Manifestantes exigen castigo a los responsables del "Halconazo" (VIDEOS)

Con la presencia de integrantes del Comité 68, organizaciones sindicales, de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación y grupos de estudiantes, se realizó este jueves la marcha con motivo del 50 aniversario de la matanza de Estado conocida como el Halconazo, cuyo reclamo principal fue el castigo a los responsables del ataque contra cientos de estudiantes en 1971.

Este año, los manifestantes urgieron al Gobierno mexicano frenar la represión que viven los normalistas en Chiapas, donde son sujetos de detenciones y abusos policiales, lo mismo que en Puebla.

Asimismo, se pronunciaron por que el regreso a clases en el país se haga con todas las medidas que garanticen la seguridad de los alumnos y docentes, y solicitaron desaparecer la forma de contratación outsourcing.

"¡Castigo a los asesinos!" claman los manifestantes en la marcha con motivo del 50 aniversario del "Halconazo"

Fueron poco más de 500 personas las que acudieron a a la manifestación que partió a las 16:00 horas del Metro Normal, donde el contingente salió con dirección al Zócalo, sobre la calzada México-Tacuba. En el camino, la presencia de elementos policiacos fue mínima y sólo se limitó a acciones para regular el tránsito.

Con el Comité 68 en el frente, la marcha transcurrió sin altercados hasta llegar al primer cuadro de la Ciudad, donde cerraron algunos negocios por la presencia de un grupo de anarquistas, quienes realizaron pintas en tapiales, en algunas cortinas y en mobiliario del Metrobús de la Línea 4, sin que ocurriera algún enfrentamiento y con afectaciones menores.

En el cruce de avenida Juárez y Humboldt, el contingente realizó una parada para colocar un antimonumento que recuerde lo ocurrido hace 50 años.

Ya en el Zócalo, Felix Hernández Gamundi, del Comité 68, recordó que en 1968 el Gobierno nunca fue capaz de dar una respuesta distinta de la represión y el 10 de junio de 1971, cuando la juventud y el pueblo mexicano decidió retomar la calle en un acto fundamental de solidaridad con el movimiento estudiantil de Nuevo León, el Gobierno, aterrorizado, reaccionó de la misma manera que el 2 de octubre de 1968, con violencia.