¡Ah qué Madrazo!

¡Ah qué Madrazo!
Por:
  • Carlos Urdiales

No hay que hacerse bolas, la tardía e inverosímil revelación de Roberto Madrazo que nada pinta ya en la vida política ni de su partido, respecto a la supuesta ventaja de Andrés Manuel López Obrador en 2006 en “sus” actas, no en las del PRI, busca congraciarse públicamente con el nuevo poder nacional de Morena y AMLO. Y lo logró.

La aparente madriza pública y publicada en contra de Roberto Madrazo, encabezada por el expresidente Felipe Calderón, y secundada por el entonces presidente del IFE, Luis Carlos Ugalde, y por decenas que critican esa singular memoria y gallardía, el destiempo, la impudicia y frivolidad del excandidato a la Presidencia para decir lo que nunca se atrevió ni publicó en sus memorias electoreras, evitaron que el mañoso tabasqueño consiguiera lo que salió a buscar.

Afamado tramposo maratonista, el exlíder priista cortó camino, salió de su ostracismo para ir a uno de los espacios radiofónicos más respetados por el Presidente electo, Telereportaje de Tabasco, de los hermanos Sibilla Oropesa a derramar la miel que los oídos de AMLO y compañía bebieron gustosos. El próximo Presidente repite: “siempre supe que hubo fraude”. Y los demás vienen detrás.

El coordinador de la bancada de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, reconoció a Roberto Madrazo por haber admitido que en las elecciones presidenciales de 2006 hubo fraude, por lo que se refirió al priista con una frase bíblica: “de los arrepentidos será

el reino de los cielos”.

Miguel Ángel Mancera, coordinador del grupo parlamentario del Partido de la Revolución Democrática, en el Senado, calificó como gravísimo lo dicho por Roberto Madrazo sobre el resultado de la elección presidencial de 2006. “Gravísimo, la verdad que me parece muy grave, muy grave que se diga que eso sucedió, porque viene a reafirmar algo que durante mucho tiempo sostuvimos. Porque nosotros estuvimos en esa lucha. Entonces, me parece grave”.  Y los que se acumulen.

La conveniencia de los OXXO. Un estimado lector comparte: Quiero contarle la trágica historia que viví junto con mi esposa.Una historia de extorsión que debe interesar a todos, porque todos los ciudadanos somos potenciales víctimas del fraude que hoy se da todos los días, al amparo de las tiendas OXXO, que como usted sabe, se encuentran esparcidas por cientos en esta Ciudad de México

y estados de la República.

“Hace unos días le llamaron a mi esposa a la casa, diciéndole que me tenían secuestrado. Sabe, somos de la tercera edad y ella no utiliza teléfono celular. Le pidieron 50 mil pesos. Ella, por los nervios, no corroboró mi condición, y les dijo que sólo tenía cinco mil, a lo que accedieron dando un número de cuenta, con la indicación que lo hiciera en cinco tantos de 990 pesos en diferentes tiendas OXXO.

Cuando decidimos levantar la denuncia en el Ministerio Público, nos dijeron que la empresa OXXO tenía que proporcionar el nombre del dueño de la cuenta. Regresamos al OXXO para pedir los datos y los empleados solamente se rieron y nos dijeron que esa información no la obtendríamos en ningún lado.

Es preocupante cómo estas tiendas operan sin regulación alguna. Pasaron de un día a otro, de ser una mera cadena de abarrotes a un gran centro distribuidor de equipos telefónicos y tarjetas de débito, todo ello sin reparar en la identidad del comprador, ya fueran menores de edad o probables delincuentes, fomentando con ello la comisión de delitos como la extorsión en todo el país.

Estoy decidido a que mi historia no sea una más. Hemos sufrido en carne propia la extorsión y mi esposa ha perdido la tranquilidad. Acudiré a los medios de comunicación, y si es necesario al nuevo gobierno y a los legisladores, porque estamos frente a una actividad totalmente irregular, sin vigilancia alguna.

Lo más grave de todo es que estas tiendas OXXO ofrecen servicios que rebasan su capacidad, para lo que originalmente fueron creadas. Es fundamental alertar a la población y todos debemos sumarnos y exigir que la autoridad ponga orden”. Don “J”, sumados estamos.