Ausentes y presentes

Ausentes y presentes
Por:
  • javier_solorzano_zinser

Río de Janeiro.— Están llegando los días en que se empieza a hablar de deportes y ya no tanto del complejo entorno que rodea a los Juegos Olímpicos. A un día de la ceremonia de inauguración el clima, el ambiente va cambiando, no del todo porque hay muchas inquietudes por todos lados y nadie puede bajar la guardia. Lo que es un hecho es que estamos cerca de que el deporte sea el centro sobre el cual se mueva la vida en Río, y en algún sentido del mundo.

¿Son todos los que son y están los que deben estar en los juegos? Esta pregunta no tiene una respuesta definitiva, siempre termina por ser un enigma lo que hubiera pasado si los ausentes estuvieran presentes.

Sin duda la ausencia de los rusos abre una zanja al espectáculo y a la competencia. Su presencia a lo largo de los juegos ha sido de alguna manera un debe de debe. Su asistencia en otros tiempos era en algún sentido el espacio para que el capitalismo y el comunismo, el este y el oeste, tuvieran una batalla más.

El problema en que metieron las autoridades rusas a los deportistas, entró desde hace tiempo en un camino sin regreso. La evidencia fue creciendo más allá de los dimes y diretes entre COI, WADA y los dirigentes rusos. Parecía más una batalla política que la discusión sobre una investigación sobre dopaje.

El mundo de los deportes ha sido testigo de innumerables elucubraciones sobre el presunto dopaje de los atletas rusos. En cada justa deportiva el tema se ponía en la mesa, pero al no existir mecanismos para saber lo que pasaba, todo quedaba en especulaciones sobre el porqué eran tan poderosos y dominantes los deportistas del otro lado de la “cortina”.

Se dijeron muchas cosas en aquellos años y también se dijeron muchas mentiras, cargadas de lugares comunes e intenciones ideológicas.

La investigación encargada al abogado canadiense Richard McLaren, terminó por poner en evidencia lo que a lo largo de varios años ha sido una práctica habitual de médicos y funcionarios rusos: el cambio de las pruebas de orina para esconder las originales de los atletas rusos, en particular los que practican el atletismo.

La ausencia de algunos deportistas rusos, en nada demerita las competencias. Al fin y al cabo están fuera debido a la trampa en que las autoridades metieron a los deportistas o en la cual se metieron los propios deportistas.

Las otras ausencias tienen todo tipo de razones. Desde los que argumentan que le tienen miedo al zika, pasando por alto que si bien es una epidemia que merece toda la atención existen defensas concretas, hasta aquellos que sin decirlo, es sabido que no van porque no quieren perder su dinero; ganar da prestigio pero no dinero.

A decir de los especialistas, Sport Ilustrated, se asegura que si bien le va a México, alcanzará dos medallas. Es difícil saberlo, cualquier tipo de circunstancia imprevisible y una buena o mala preparación lleva a la gloria o al infierno.

Hay deportistas que van por las medallas, otros son protagonistas y otros más van por mejorar sus tiempos. Todos en sus sueños aspiran a las medallas, pero es obvio que no todos llegan, más de alguno lo sabe en lo más recóndito de sus sueños y aspiraciones, al final lo más importante termina por ser la batalla que esgrimen en contra de ellos mismos.

La noche de ayer estuvimos en Maracaná. Vimos un ensayo de lo que será la ceremonia de inauguración de los juegos. Le adelantamos que uno de los ejes centrales será la historia, la relación de Brasil con Portugal, la independencia y las raíces africanas.

La naturaleza, medio ambiente y el Amazonas. La música, el aporte invaluable de Brasil al mundo. El futbol, el deporte que hizo feliz a una nación en momentos aciagos. La fiesta se está acercando. Las calles y las playas están listas… ya le contaremos…

 RESQUICIOS.

Así nos lo contaron:

Es cuestión de no salir de los diez primeros. A partir de ello todo puede pasar. Llevo ocho años preparándome, estoy lista: Tamara Vega, 24 años, pentatleta mexicana.

solorzano52mx@yahoo.com.mx

Twitter: @JavierSolorzano