Cambios al SAR

La semana pasada se aprobaron cambios a las reglas de inversión de las siefores. Un tema que debería interesar a cuando menos 40 millones de trabajadores que tienen una cuenta en el Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR).

Como lo informó La Razón el viernes, las autoridades reguladoras del Sistema de Ahorro para el Retiro aprobaron dos cambios al régimen de inversión de las siefores: Primero, definieron nuevas reglas para la compra individual de acciones de empresas mexicanas listadas en la Bolsa Mexicana de Valores, y segundo, se realizaron cambios en la metodología que se aplica al control de riesgos.

En el primer caso, se amplían las posibilidades de inversión de las siefores, lo que, por definición, permitirá una mayor diversificación de su cartera basada en estrategias más selectivas; al mismo tiempo que permite el financiamiento al sector corporativo.

En el segundo, se evita el comportamiento procíclico de estas sociedades cuando arrecia la volatilidad de los mercados financieros; esto es, las afores ya no estarán obligadas a vender sus posiciones en activos expuestos a minusvalías en sus precios, lo que significa materializar las pérdidas renunciando al mismo tiempo a los beneficios de una recuperación en los mercados, en detrimento del patrimonio de los trabajadores.

Para dimensionar la transcendencia de estos cambios conviene considerar dos aspectos: Las afores son el mayor inversionista institucional del país. Administran 1 billón 160 mil millones de pesos, que representan ya más de una tercera parte del saldo del ahorro financiero. Cerca 10% se encuentra invertido en renta variable, por lo que la venta forzada de sus posiciones en momentos de ajuste en los mercados profundiza su caída.

El segundo aspecto tiene que ver con el interés de los propios trabajadores, para quienes en el 90% de los casos estas cuentas individuales en el SAR representan su principal patrimonio, y si bien actualmente las siefores ofrecen los mejores rendimientos del mercado financiero, al final el ahorro para el retiro será insuficiente para una vida digna en la vejez para la mayoría de los mexicanos.

Por ello, siguen siendo urgentes medidas que mejoren aún más los rendimientos netos y aumenten las aportaciones.

manuel.herrera@3.80.3.65

agp