¿Cuál aeropuerto costará menos?

El Colegio de Ingenieros Civiles de México afirmó que el proyecto de los aeropuertos Santa Lucía-Benito Juárez costará 385 mil millones de pesos, 66 por ciento más que el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) en Texcoco.

El Colegio de Ingenieros afirma que el costo del aeropuerto en Santa Lucía, presupuestado por el equipo del Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, está subestimado.

El costo real por construir el nuevo edificio terminal, dos pistas, obras de acceso y conectividad con el actual Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), que por sí solas costarían alrededor de 63 mil mdp, de acuerdo con el Instituto Mexicano del Transporte, llegan a un global estimado de 217 mil mdp, lejos de los 70 mil mdp que se promocionan en el proyecto de AMLO.

A esos 217 mil mdp, hay que sumar el fondo perdido por cancelar contratos del NAIM (100 mil mdp de acuerdo con el Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México), más las remodelaciones necesarias para mantener activo el AICM, lo que significarían al menos otros 5 mil millones de pesos.

Dice el Colegio de Ingenieros Civiles de México: “Llama la atención, a manera de ejemplo, que el costo por metro cuadrado, que se está considerando en la terminal de Santa Lucía, sea de 4 mil 600 pesos, cuando en el mercado anda en alrededor de 20 mil pesos y 15 mil pesos por metro cuadrado en construcciones muy económicas, por lo que, considerando superficies y por simple regla de tres, un presupuesto austero y apegado a la realidad, andaría en alrededor de 217 mil millones de pesos”.

El Colegio también recalculó el costo del NAIM en Texcoco y le redujo 52 mil mdp, quedando en 232 mil mdp, no en los 285 mil mdp estimados hasta el momento. Se descontaron 17 mil mdp del presupuesto por concepto de obras hidráulicas, que no forman parte propiamente del NAIM, ya que son necesarias e independientes; se restaron 23 mil mdp por los recursos que se obtendrían al vender los terrenos del actual AICM (una vez desocupado), para lo cual estimaron un valor, conservador, de 3 mil pesos por metro cuadrado.

Otro descuento de 12 mil mdp sería por ahorros en la construcción, consecuencia del plan de reducción de costos que implementa GACM y del cual otros, como el ingeniero Carlos Slim, habían anticipado podían hacerse cambios de materiales, acabados y otras áreas susceptibles de economías significativas.

El Colegio de Ingenieros Civiles de México considera: “Error sólo comparar al día de hoy los costos relacionados directamente con la construcción de las terminales NAIM versus Santa Lucía, ya que tomando en consideración todos los costos relacionados con sus infraestructuras y recuperaciones correspondientes, la opción de Texcoco representa menores costos”.

Javier Jiménez Espriú, próximo secretario de Comunicaciones, desestimó el dictamen del Colegio de Ingenieros; “dicen que no hay forma de evaluar bien porque no hay elementos suficientes, porque está en forma conceptual y luego, presupuestan hasta centavos, entonces está medio mal”.

Por su parte, la Academia de Ingeniería considera que, a diferencia del proyecto de Santa Lucía, la obra en Texcoco tiene menos probabilidades de presentar una “explosión en costos”, hasta el límite máximo estimado de 439 mil mdp, pues el NAIM cuenta con más estudios de respaldo, que mitigan su incertidumbre.

La Academia expuso que los proyectos pueden clasificarse en cinco estratos, de acuerdo con su grado de incertidumbre. De menor (Clase I) a mayor (Clase V). La obra propuesta por AMLO es un proyecto de Clase V, es decir, con la máxima incertidumbre (de entre 50% y 100%), pues está “en una etapa conceptual, con muy poca información disponible”.

En contraste, el NAIM fue clasificado en tres de sus cinco obras componentes:  aeropuerto, suministro de energía y obras hidráulicas, como nivel III (incertidumbre media, de entre 15% y 25%), mientras que, en las dos obras complementarias, vialidades y medios de transporte colectivo de acceso, fue clasificado como Clase V. El debate y el tiempo vuelan. ¿Cómo se hará la consulta pública? Otro acertijo a debatir y resolver.