De fierro viejo a tren rápido

La ruta que estudia el equipo de Gerardo Ruiz Esparza para conectar el tren México-Toluca con el Nuevo AICM es de unos 32 kilómetros y que ocupa los derechos de vía con que cuenta el Estado y que en tramos utiliza —y en otros no— el Ferrocarril del Valle de México, que dirige Erick Wetzel, y daría servicio a algunos centros de demanda al poniente y centro de la capital.

A finales de este año, la Subsecretaría de Transporte a cargo de Yuriria Mascott estima que a finales de este año habrá un avance del 50% del también llamado Choritren y entraría en operación a mediados de 2018; al llegar a la Ciudad de México, el plan es utilizar el derecho de vía que en algunas zonas todavía deja entrever antiguos rieles y durmientes, como por ejemplo el trazo que dejó el antiguo Ferrocarril México-Cuernavaca. Ello permitiría establecer una estación en las inmediaciones de Polanco-Lomas, donde los usuarios podrían documentar su equipaje directo al avión que tomarán, siendo la siguiente estación Buenavista, a donde llega el tren Suburbano que dirige Max Zurita. A partir de ese punto, se usaría otro trazo de cerca de 25 kilómetros hasta el megaproeyecto aeroportuario conducido por Federico Patiño.

En los próximos tres meses la SCT espera contar con el estudio de preinversión para realizar los estudios de viabilidad y establecer el método de ejecución. Otra solución que se trabaja para el Valle de México, pues.

 Al rescate del Edén. Hoy el Presidente Enrique Peña visita Villahermosa para reunirse con el gobernador Arturo Núñez y su gabinete, en donde se presentarán las acciones inmediatas para reactivar la actividad económica en la entidad, al igual que en Campeche que gobierna Alejandro Moreno, y en donde la caída de la actividad petrolera provoca estancamiento económico y los niveles más altos de desempleo en el país. A la par de las acciones de rescate se suman planes de mediano y largo plazo para potenciar al sector agropecuario y al turístico, así como

la manufactura.

 Desnivel al 30%. Donde las cosas marchan con prisa es en el Desnivel Mixcoac-Insurgentes, la vialidad subterránea que la Secretaría de Obras capitalina a cargo de Edgar Tungüi contrató con La Peninsular de Carlos Hank González, con Indi de Manuel Muñozcano e Idinsa de Víctor Ortíz.

Actualmente el avance es de prácticamente del 29% y pronto iniciarán los trabajos en el “Frente de Trabajo 7”, es decir la excavación por debajo de avenida Insurgentes que sólo se ejecutará de madrugada.

 Carlos Joaquín en el templo. Vaya numerito que armó el pasado domingo el candidato aliancista por Quintana Roo, Carlos Joaquín González: no cansado de viajar en aviones privados y pasar la charola entre políticos y empresarios, entró a la Parroquia de Cristo Resucitado con todo y guaruras, para luego empezar a pedir el voto de la concurrencia. Sí el oportunismo político es feo, el religioso peor.

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