El apoyo a López Obrador

Bibiana Belsasso

La semana pasada se manifestaron las llamadas Adelitas, en inmediaciones del Monumento a la Revolución. Afirman que durante la campaña presidencial para el 2006, estas mujeres de clase humilde fueron reclutadas y utilizadas en la toma del Paseo de la Reforma y la resistencia civil de AMLO. A estas mujeres les pidieron entre 104 mil a 250 mil pesos con la promesa de que sería el enganche de su nueva vivienda. Además tuvieron que aportar 150 pesos mensuales que se irían a una caja chica para gastos de marchas y manifestaciones. Por supuesto no les cumplieron, las dejaron sin su dinero y sin la vivienda, aunque ellas durante años siguieron participando en muchas de las marchas del lopezobradorismo.

Estas prácticas fueron muy comunes durante la administración de Andrés Manuel López Obrador al frente del gobierno de la capital. Al Instituto de Vivienda del Distrito Federal se le otorgaron 10 mil 500 millones de pesos para aplicarlos a créditos de vivienda. Cuando se solicitaba la información de a quién se le habían otorgado dichos créditos, resultaba que esa información estaba clasificada y no se podían dar informes de ella, aún con la ley de transparencia.

Aunque las autoridades en ese momento lo negaron, se exigía como requisito estar afiliado al partido o más bien ser simpatizante de AMLO.

En ese 2006 entrevisté a Laura Itzel Castillo quien en ese entonces fungía como Secretaria de Desarrollo Social y cuando le cuestioné a quién se le habían otorgado los créditos de vivienda, le llamó a David para que le informara. David Ricardo Cervantes era el entonces director del Instituto de Vivienda del Distrito Federal, pero además presidía una importante organización que otorga vivienda llamada Asamblea de Barrios Patria Nueva, misma que ha apoyado siempre a López Obrador, en todas sus manifestaciones.

Pero no sólo los créditos de vivienda le han dado a López mucho dinero y manifestantes, entre otros rubros también estaba el de los taxis tolerados.

En ese entonces en la Ciudad de México había más de 25,000 taxis que circulaban de manera ilegal. Muchos conductores de estos autos utilizaban amparos apócrifos para poder trabajar. En la administracion pasada había más de 105 mil autos que pagaban amparos por no estar en regla.

La venta de los amparos oscilaba entre los $3,500 pesos, una cantidad nada despreciable para beneficiar a algunos líderes. A esto hay que agregarle los beneficios que los taxis irregulares, muchas veces, representan para algunos políticos. Usted recordará las marchas contra el desafuro de AMLO hace poco más de seis años; bueno, más de 500 taxistas, dueños de unidades de estos llamados “sin papeles”, marcharon en contra del desafuero de Andrés Manuel López Obrador.

Y entre estas personas se encuentra el voto duro de AMLO en la capital. De los que han sido beneficiados, o por lo menos se les han hecho promesas. ¿A usted le suenan extraños los audios que escuchamos esta semana donde se le piden 6 millones de dólares a empresarios para poder ganar la campaña? Por supuesto que no y el premio sería, según el audio, una plática con López, ¿para que?, pues seguramente para ver cómo se le podría regresar el favor a los empresarios que decidieran apoyar. Habrá que seguir analizando para descifrar de dónde está saliendo tanto apoyo para la campaña de López Obrador. No es tan difícil averiguarlo.

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