El otro “tesoro” en el subsuelo

El otro “tesoro” en el subsuelo
Por:
  • larazon

José Manuel Herrera.

Recientemente, un reporte de la Administración de Información de Energía confirmó el potencial de reservas de gas shale “técnicamente recuperables” de México y las ubicó como las sextas más grandes a nivel mundial.

Le puedo asegurar que en la próxima reforma energética, tan importantes serán los temas relacionados con el petróleo como los relativos a la explotación del gas shale. Recordemos que en noviembre del 2011 el gobierno anunció el descubrimiento de importantes yacimientos de este tipo de gas natural “no convencional”, que cubriría las necesidades energéticas del país durante casi un siglo.

Según cálculos de la Secretaría de Energía, tras estos descubrimientos, las reservas de gas natural aumentarían de 4 billones a 20 billones de pies cúbicos y de acuerdo con un análisis publicado en ese entonces por el Departamento de Energía de los Estados Unidos (World Shale Gas Resources, an initial assessment of 14 region outside the United States), las reservas contabilizadas en México serían del orden de los 681 billones de pies cúbicos. En este documento se ubican los recursos del país en el cuarto lugar, sólo superados por China, Estados Unidos y Argentina.

Hace unos días, la misma Administración de Información de Energía (EIA) publicó su segundo estudio prospectivo, ahora extendido a 41 países, donde México sigue figurando entre las economías con altos recursos “técnicamente recuperables”, calculados en 545 billones de pies cúbicos. En este caso, se ubica en el sexto sitio, por debajo de China, Argentina, Argelia, Estados Unidos y Canadá. Sin embargo, sólo estos dos últimos producen gas shale en cantidades comerciales, mientras México es un importador neto de gas natural.

A decir de los directivos de Gas Natural Fenosa, “esta confirmación de los recursos prospectivos que tiene México, cobra relevancia y pone de manifiesto la imperiosa necesidad de poner en valor los vastos recursos con los que cuenta.” Y sin lugar a dudas respalda la necesidad de reformar al sector energético mexicano y convertirlo en una opción viable para el desarrollo del país.

manuel.herrera@3.80.3.65

Twitter: @DarkEconomist