El pacto informativo

El pacto informativo
Por:
  • larazon

El gobierno siente que, informativamente, está en desventaja en la lucha que se libra contra el crimen organizado. Y quiere, desde luego, revertir esa situación.

Sí, sí está en desventaja, aunque no todo es culpa de los medios.

Es deplorable que periódicos de alta circulación y hogar de articulistas brillantes se presten a ser correos de los narcotraficantes.

Si un diario publica la cabeza sangrante de un decapitado con un mensaje dirigido a una autoridad o al cabecilla de la banda rival, le está haciendo un servicio deliberado a los criminales.

Más aún: fomenta esa práctica homicida y cruel al advertir a los criminales que de esa manera obtienen lo que quieren.

Se les hace el favor de aterrorizar a la población para que ésta decaiga en su moral y presione al gobierno a bajar la intensidad del combate al narco.

De ese tamaño es el favor que se le hace al crimen organizado, y de ese calibre es el daño social que se provoca con el manejo irresponsable de la información.

¿Vale la pena ensangrentar más a México a fin de vender más periódicos o presumir una independencia editorial que no se demuestra así?

La respuesta es no. Sí se requiere, en cambio, un compromiso con el país en situaciones delicadas como la que vivimos.

Gobernación alista un documento para que directivos de medios se comprometan a equilibrar la información sobre violencia con acciones importantes que el gobierno realiza en el combate por la seguridad.

Es una iniciativa destinada al baúl de las buenas intenciones.

Desde el gobierno no se puede convocar a un pacto informativo a la manera en que se plantea (Excélsior, miércoles 23 de junio)

Primero necesita aclarar el ambiente político en el país.

El gobierno tiene que demostrar que su prioridad es la seguridad pública, y no el 2012.

Los medios no pueden prestarse a las maniobras del narco, ni a las estrategias electorales del gobierno.

El gobierno, ¿va a trabajar principalmente por México o le va a dar prioridad a su partido? No son la misma cosa.

Se requiere, además, que el gobierno informe bien. Ordenado. Con un vocero único.

Una secretaría le dice a los medios que encontró un cargamento de explosivos capaz de volar el Metro y otra aclara que sólo eran materiales para velitas de colores.

El gobierno invita a la prensa a fotografiar las pistolas de oro y diamantes de los narcos, como si eso fuera un buen mensaje.

En síntesis: primero hay que saber, en los hechos, qué quiere el gobierno.

phl@3.80.3.65

Twitter: @phiriart