El secuestro y la indiferencia ciudadana

El secuestro y la indiferencia ciudadana
Por:
  • bibiana_belsasso

“Si no marchamos unidos, nos ahorcarán por separado”

El domingo pasado en el Centro Histórico de la Ciudad de México, repleto de gente y a plena luz del día, se llevó a cabo un simulacro de plagio organizado por las organizaciones Alto al Secuestro, Mensajeros Unidos y la Secretaría de Seguridad Pública de la CDMX. Al cruce peatonal de Madero y Eje Central llegó un automóvil a alta velocidad, y de forma violenta varios sujetos subieron a una mujer que cruzaba la calle. Decenas de personas vieron el incidente, algunos se alejaron, otros caminaron como si no estuviera pasando nada. Nadie intentó auxiliar a la víctima. Y sólo hubo una llamada al 911.

Platiqué con Isabel Miranda de Wallace sobre el simulacro.

“Indudablemente, me parece que queda de manifiesto por qué los delincuentes y los violentos pueden actuar con tanta impunidad, porque tampoco los ciudadanos hacemos nuestra parte, y nuestra parte es denunciar y ser solidarios uno con el otro sobre lo que veamos sin ponernos en riesgo, es decir, no sabemos qué hacer ni cómo hacerlo; estuvimos ante botones de pánico que estaban en las esquinas y nadie los oprimió porque quizá ni siquiera saben que existen.

“Nadie pudo dar una descripción de qué era lo que estaba pasando, nadie se solidarizó hablando por teléfono en ese momento a alguna autoridad o yendo a pedir ayuda… incluso en el video se nota cómo se dispersa la gente y abandonan y dejan sola, en uno de los casos, a la persona que estaba siendo secuestrada. Entonces indudablemente el experimento fue muy revelador de la apatía, del miedo”.

Llama la atención que en un país como México, en donde ha habido ocho mil 677 secuestros, desde el 2012 a la fecha, es decir, seis secuestros al día, la gente no sepa cómo actuar ante los delitos.

“Estamos buscando alternativas para tratar de combatir el delito y lo que hemos descubierto es que mucha gente no sabe qué hacer ante este evento.

Éste es un primer intento, luego vamos a hacer otros en otro sentido ,pero lo que queremos es educar a la población para que sepa qué tiene que hacer, a dónde tiene que hablar”, señaló.

Al concluir el simulacro del secuestro, se entrevistó a varias de las personas que observaron y Wallace me dijo al respecto:

“Lo que detectamos de las primeras entrevistas es que la gente efectivamente es indiferente, es decir, puede estar pasando algo grave y no ayuda. Recordarás hace una semana también a una joven que la estaban violentando en la calle y nadie se metió, ella se tuvo que defender quitándole el arma a su propio agresor”.

La apatía de la gente no es nueva, desde hace años en el Centro de la Ciudad de México se da una práctica para asaltar, la llamada de los Chineros, se le conoce así porque delincuentes aplican la llave china, es decir aprietan la yugular a la víctima hasta que ésta pierde el conocimiento y la asaltan. La gente que pasa nunca auxilia a las víctimas ni denuncia.

Y es que la ciudadanía se ha acostumbrado a la violencia y no ha tomado conciencia que sin nuestro apoyo, la situación de seguridad no puede mejorar.

“La indiferencia y saber que a cualquiera nos puede tocar, y hacerle entender a los ciudadanos que si actuamos juntos va a ser más fácil que solos; y la otra, enseñarles cómo denunciar sin ponerse en riesgo, ése es el otro paso”, afirmó la activista.

Y sí hay formas de hacer denuncias anónimas: se pueden tomar fotografías y subirlas a las aplicaciones de la policía de la CDMX o la Federal. Se pueden tocar los botones de pánico o llamar al 911 o al 086.

Pero también existe el tema de que una vez, si es que se logra detener a los delincuentes, el proceso judicial se hace eterno. Hugo Alberto Wallace está cumpliendo 12 años de haber sido secuestrado y asesinado, y los secuestradores confesos todavía no tienen sentencia.

“Pese a que el líder de los secuestradores y dos personas más, que son coacusados, han confesado ante un juez, que sí participaron en el secuestro, dijeron todo lo que le hicieron a mi hijo, cómo se lo hicieron y el día de hoy seguimos sin tener sentencia, el Poder Judicial ha sido incapaz de ponerle un hasta aquí a los delincuentes y siguen emitiendo pretextos y argucias para dilatar el proceso y que nunca los sentencien”, lamentó Miranda de Wallace.

Mientras la ciudadanía no sepa cómo actuar ante los delitos, o no quiera, y nuestra justicia sea tan poco eficiente, la delincuencia no va a disminuir.

bibibelsasso@hotmail.com

Twitter:@bibianabelsasso