El terrorismo avanza en Europa

Se cumple un mes del atentado terrorista que conmocionó a España y revive los miedos del pasado que traen a la memoria los atentados del 11-M, un momento traumático para el país europeo y, en general, para el mundo que observa preocupante cómo cambia el rumbo de la sociedad española que ahora enfrenta otro tipo de problema relacionado con el mismo método de intimidación, el terrorismo de extremistas.

Inglaterra también vuelve a ser escenario de otro atentado terrorista en la estación de metro Parsons Green, al suroeste de Londres. A primeras horas de la mañana del viernes un explosivo de fabricación casera detonó en un tren que se dirigía a la capital inglesa y logró lastimar a 32 personas que se dirigían a sus trabajos, a sus escuelas, o simplemente decidieron tomar ese transporte sin esperar que un desquiciado introdujera un explosivo que cambiaría su camino habitual por un paseo de emergencia hacia uno de los hospitales londinense que atendía a los heridos. En este caso no hay muertes que lamentar.

Como se podía esperar por todos los sucesos de terror recientes que han mancillado territorio europeo y, a pesar de que las autoridades del Reino Unido no lo han confirmado, el ataque se atribuyó al grupo terrorista del Estado Islámico que mantiene en perpetua alerta a España, Francia, Alemania, Suecia y Reino Unido, por mencionar algunos de los países que han sufrido ataques terroristas en este último año.

Con la decisión de la ministra británica Theresa May, de mantener en alerta crítica el nivel de terrorismo, el gobierno inglés optó por sacar a sus soldados a las calles para ayudar al cuerpo policial del país y reforzar la seguridad en los puntos sensibles ante un posible nuevo ataque en contra de la población y la forma de vida de los europeos.