¿Embarazada?...¡Despedida!

¿Embarazada?...¡Despedida!
Por:
  • larazon

Mónica Garza

Hoy que se celebra por todo lo alto al amor, yo reflexiono acerca de la circunstancia en la que éste se manifiesta en cada poro del cuerpo de una mujer y es sin duda durante el embarazo. Ese proceso en el que una se prepara para ser el vehículo del mayor de los milagros, la vida.

Pero en la vida práctica y en un país como el nuestro, el embarazo también puede convertirse en sinónimo de vulnerabilidad para muchas mujeres que en esa condición estarán irremediablemente destinadas al despido laboral.

Según datos del INEGI sólo en el Distrito Federal el 31 por ciento de los hogares tiene como única fuente de ingreso el salario de una mujer, y es por eso que hoy decido poner el dedo en este renglón.

Esta semana cayó en mis manos una encuesta sobre discriminación a mujeres embarazadas en la Ciudad de México que realizó en junio de 2013 Consulta Mitofsky para el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (Copred). Los resultados me sorprendieron.

52.5 por ciento de las personas cuestionadas consideran que sí existe discriminación hacia las mujeres embarazadas. Y de una lista de 40 grupos en situación de discriminación, las mujeres embarazadas se ubicaron en el lugar número veintisiete.

Ésta es una realidad que cruza a todo tipo de mujeres trabajadoras y en todos los niveles. Lamentable porque las mujeres representan más

del 50 por ciento de la población en nuestro país.

Según el reporte del INEGI de 2012, la población económicamente activa de mujeres en México es de 19 millones 379 mil 38, de las cuales 69 por ciento son madres.

Las mujeres mexicanas con más de 15 años y por lo menos un hijo tienen una participación económica del 42.2 por ciento.

“Cada vez que un empleador despide a una mujer embarazada destruye a todo un entorno familiar que en gran medida depende de ella. Lo primero que va a tratar de hacer el empleador es que tú renuncies y te va a mover de lugar físico, horario y funciones, pero las mujeres embarazadas no renunciamos. ¿Por qué? Por naturaleza”…

Me dijo la presidenta del Copred Jacqueline L’Hoist, quien precisamente prepara una informe detallado sobre este fenómeno de discriminación en la ciudad de México que será presentado el próximo mes de mayo, con iniciativas que tienen como objetivo endurecer las sanciones legales a este respecto.

“¿Vamos a aceptar que indefinidamente se corra a una mujer de su trabajo porque está embarazada, cuando de ese cincuenta por ciento de la población la mayoría son mujeres jóvenes que pueden quedar embarazadas en cualquier momento?”

“El tema es oscuro porque si ves las solicitudes de empleo, en ninguna te piden prueba de embarazo, pero la piden por fuera. Hemos encontrado casos en casi todas las empresas que hemos investigado. Ahí se cometen dos delitos: el despido injustificado y la causal, porque es una conducta discriminatoria”, puntualizó L’Hoist.

De acuerdo al código penal, la sanción por el delito de discriminación es de tres años de cárcel y trabajo comunitario, aunque la cárcel se puede librar pagando una fianza.

Es importante mencionar que al día de hoy no se conoce un solo caso en el país, de algún particular o empresa, que haya sido sancionado con cárcel por haber despedido injustificadamente a una mujer que estaba embarazada, seguramente porque el “arreglo” sigue estando por encima de la denuncia.

Según el informe presentado por el Copred en 2014 se realizaron un total de mil 113 atenciones ciudadanas por presuntos actos de discriminación, en los casos de mujeres 85 fueron por discriminación a mujeres embarazadas.

“Yo quitaría la sentencia de privación de la libertad y aumentaría el trabajo comunitario en calidad de obligatorio. Porque meter al empleador a la cárcel no resuelve nada pues las cárceles no son correctivas. Mejor hablemos de una muy fuerte sanción económica y una visibilidad moral”, piensa en voz alta Jacqueline L’Hoist.

Sin duda el enemigo a enfrentar es inmenso, porque se manifiesta sobre todo en el sector empresarial donde hay expertos en darle la vuelta a la ley.

Por eso es importante una reflexión profunda a este respecto y no sólo como un asunto legal o de calidad humana, sino como una cuestión cultural.

monica.garza@razon.mx

Twitter: @monicagarzag