En el año de las reformas

Javier Solórzano Zinser

Sería absurdo soslayar lo que ha pasado en el país en el último año en materia de reformas. Muchas áreas han sufrido cambios importantes teniendo al Congreso como testigo y actor. Lo que venga en los próximos años será la verdadera prueba de lo que hoy se ha legislado y aprobado.

No sabemos qué vaya a pasar, pero por lo pronto hay una clara división entre quienes piensan que las reformas van a potenciar al país y lo van a colocar bajo una nueva dinámica que lo hará crecer, y entre quienes tienen la certeza de que todo lo que se ha hecho no va a servir de nada. No hay manera de saber qué va a pasar porque nadie sabe cuál va a ser el futuro. No sabemos qué viene, a pesar de que tengamos las reformas que, se asegura, nos van a ubicar bajo otra perspectiva.

Con la virtual aprobación de la Reforma Energética se cierra un ciclo de cambios que en un principio se veían con optimismo, pero que al final terminaron por ser aprobados con confrontaciones de forma y de fondo. Era hasta cierto punto de esperarse que en lo general habría acuerdo, y más cuando el Pacto por México, en un principio, logró conjuntar voluntades políticas propias de inicio de sexenio, que permitieron construir acuerdos.

A esto se sumó la salida de López Obrador del PRD. Si bien dejo el sol azteca un buen personaje que da entre otras cosas votos, ello les permitió también capacidad de maniobra política, como fue el hecho de forma parte del Pacto por México; es obvio que con el tabasqueño en el PRD esto nunca hubiera sido posible. Para que el pacto existiera, la presencia del PRD era fundamental, porque entre el PAN y el PRI existen acuerdos históricos que igual se han movido por los terrenos de las conveniencias, que por los de los acuerdos políticos y de la coincidencias estratégicas.

En el balance final lo que está de por medio no es tanto el hecho de que los partidos estén enfrentados en el diseño de la reformas, a estas alturas pasa a segundo plano, lo importante es que lo aprobado va a definir el rumbo del país, por lo menos durante los próximos veinte años; es esto lo que debe ser el eje de atención.

¿Las reforma aprobadas son las que necesita el país? ¿La energética abre el espacio para que el petróleo a futuro siga siendo de las y los mexicanos? ¿El futuro de las telecomunicaciones va más allá de bajar las tarifas de larga distancia? ¿La reformas nos van a llevar a una nueva vida? Es evidente que se requiere de tiempo para saberlo, pero lo que es un hecho es que estos son los verdaderos dilemas del año en que vivimos entre reformas.

 RESQUICIOS.... Así nos lo dijeron ayer:

* Si realmente queremos una reforma energética de fondo olvidemos lo que se ha hecho y empecemos de cero: Zoé Robledo, senador del PRD.

* La izquierda ha engañado a los mexicanos con la consulta: Omar Fayad, senador del PRI

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Twitter: @JavierSolorzano