Hay que enseñar al delincuente que sus acciones tienen un costo: Raymundo Collins

En una entrevista que hicimos en el cuarto de crisis de la Secretaría de Seguridad Pública de la CDMX, junto con Jorge Fernández Menéndez para Todo Personal, Raymundo Collins, nuevo titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de la CDMX, nos habla del reto que significa el cargo.

Pregunta: Raymundo ¿cómo llegas a la SSP?, ¿cómo la recibes?

RC: Me invita el Jefe de Gobierno, el doctor Amieva, a tomar por los próximos meses el mando de esta Secretaría que tiene una complejidad importante: son 83 mil elementos, 6 subsecretarías 72 sectores y una serie de grupos. Desde aquí controlamos toda la ciudad, salvo las policías delegacionales. Es la policía más importante del país, no nada más en número, en tecnología, equipamiento, tenemos más que cualquiera...

Pregunta: Asumes el mando y tienes orden de dar una vuelta de tuerca a las cosas con un plazo corto ¿se puede hacer?

RC: Se pueden hacer cosas muy importantes que se van a ver, sobre todo cuando tienes a un cuerpo policiaco que tiene ganas de trabajar. Vamos a modificar los esquemas de operación en presencia policiaca básicamente, otro esquema de patrullaje, ya los estamos modificando y ya empezamos a ver una incidencia en detenciones superior cada día. Los cuadrantes fueron en su momento muy útiles, pero la delincuencia también evoluciona; no quiero estigmatizar, pero estamos teniendo mucho delito por gente colombiana, ecuatoriana…

Pregunta: Son robos que han lacerado muchísimo a la sociedad, pero las autoridades de migración los deportan y reingresan…

RC: Sí, la ley es muy laxa, pero no podemos sentarnos a lamentarnos. Las veces que salgan y delincan debemos tener la capacidad para detenerlos, ese es el gran reto: hacer que la gente sienta que está siendo protegida. Me decía la gente que sale y no ve a la policía, ¿qué necesitamos?, que la gente los vea…

[caption id="attachment_781046" align="aligncenter" width="2317"] El titular de la SSP en conferencia de prensa.[/caption]

Pregunta: ¿En qué va a cambiar esto?

RC: Tenemos muchas quejas sobre asaltos en la Roma-Condesa-Polanco; la Procuraduría y la Secretaría vamos a implementar un operativo todos los fines de semana para tener presencia permanente en esos lugares; esa es nuestra idea de seguridad: tener presencia en toda la ciudad, necesitamos sacar a la gente a la calle...

Pregunta: Y has puesto a los helicópteros a recorrer la ciudad...

RC: Encontramos que tenemos 13 helicópteros, 10 de ellos totalmente operacionales, y vuela uno o dos; en cualquier policía del mundo es algo muy disuasivo, son un apoyo muy importante para el personal en tierra...

Pregunta: ¿Cuál dirías que es el mayor desafío? La CDMX es la más poblada y el narcomenudeo, hay muchísimos consumidores…

RC: Es un problema que siempre ha existido y en este momento hay un número importante, por eso vamos a atacar cada uno con su debida operación, no todos los delitos los atacas de la misma manera. Yo fui subdelegado de la PGR en la CDMX, fui jefe de la Policía Judicial Federal Antinarcóticos aquí, ¿cuál es la diferencia? Observo a muchísima más gente dedicada a esto en toda la ciudad, antes eran zonas muy específicas: Tepito, los Frentes y El Hoyo en Iztapalapa, estaba muy concentrado. Ahora nos encontramos con que ya no son esas tres áreas nada más donde estemos tenemos problemas. En el norte, en cualquier delito relacionado con el narco encontrabas como factor las armas de alto poder: R15, el cuerno de chivo, lanzagranadas. Aquí en la CDMX es muy raro; todos los eventos que están alterando la percepción de la ciudadanía derivan del enfrentamiento de dos grupos: La Unión Tepito y la Anti-Unión Tepito, y todas sus cuestiones son prácticamente con pistola, lo cual te indica que son grupos locales. Ellos traen una guerra desatada que estoy seguro que en la medida en que los detengamos vamos a bajar quizá 60 por ciento la violencia en la CDMX...

Pregunta: ¿Cómo está la coordinación con las instancias federales?

RC: Muy bien, tenemos muy buena relación; yo creo que en poco tiempo se va a empezar a observar que la CDMX está modificando la delincuencia a la baja; creo que sí podemos hacer algo notorio, no tenemos una varita mágica ni vamos a desaparecer la delincuencia, porque siempre existirá, pero cuando menos vamos a empezar el camino hacia el equilibrio donde la población diga ‘me siento seguro’, porque el problema es la percepción de la ciudadanía de que vivimos con mucha inseguridad. Tenemos que estar en la calle, detener a muchos delincuentes para que empecemos a virar la percepción. ..

Pregunta: La gente vive la percepción como si fuera una realidad, ¿realmente cómo estamos?

RC: Hay ciertas zonas con un grado de inseguridad importante, por ejemplo, la Gustavo A. Madero, en ciertas colonias, y en una que no voy a decir el nombre, hay 40 policías cuando debemos tener 200, vamos a aumentar la presencia. En materia de Inteligencia tenemos los elementos para poder utilizar esa inteligencia, tener resultantes que nos lleven a una operatividad importante...

Pregunta: Tienes una base de datos importantísima aquí para cotejar datos.

RC: Tenemos todo tipo de información, lo que tenemos que hacer es dársela al policía en la calle, no nos sirve de nada tenerla aquí si no se la transmitimos...

Pregunta: Tenemos en la CDMX manifestaciones, 5 o 6 eventos masivos y no recuerdo uno que no haya tenido saldo blanco.

RC: Tenemos un promedio de 8 a 12 eventos culturales, religiosos y artísticos al día y, como dices, tenemos marchas, plantones, y donde quiera vas a ver a la policía. Eso todos los días lo damos a conocer, a las 18:00 horas estoy dando una conferencia para decir lo que hicimos las 24 horas…

Pregunta: Estos datos también son importantes porque son disuasivos…

RC: Lo que tenemos que hacer es ponerle caro el costo a ser delincuentes, que sepan que va a ser detenido. La idea de Bratton es que, cuando hay grupos que empiezan a tomar en la calle, es un peligro para las personas que transitan ahí; eso es responsabilidad de nosotros, ¿qué hacemos?, mandamos gente para disuadirlo: presentamos un promedio de 500 personas al día a los juzgados cívicos; metemos un promedio de 500 motocicletas en los corralones porque se está dando mucho el delito en moto; pero también tenemos un Agrupamiento a Caballo con  80 caballos que se utilizan en equinoterapias para niños, de eso no se habla; tenemos cursos de verano gratis para los hijos de los policías y niños de los alrededores, traemos 8 mil 700 niños…

Tenemos que enseñarles que éste no es un lugar de libertades para el delincuente, esa es mi idea. Al delincuente le tienes que enseñar que su actividad tiene un costo muy importante

Pregunta: Que acaba siendo un incentivo para el policía, porque va a dar su vida por cuidar a la ciudadanía...

RC: Eso es lo que intentamos: que el policía se sienta motivado. Cuando sale a trabajar, lo primero que está en peligro es su vida; desgraciadamente a lo largo de mis intervenciones en cuerpos de seguridad me ha tocado enterrar a buenos policías, y yo creo que aquí la mayoría son muy buenos. Necesitamos integrar hacia adentro para poder salir, no al revés, que es la preocupación del doctor Amieva. En paralelo el mensaje hacia adentro fue ‘se acabaron los moches, aquí no existe eso’.

Pregunta: ¿Qué concepción policial hay que tener para la CDMX? Hay desde los que tienen tolerancia cero hasta los que dicen: ‘Hay que ser tolerantes con ciertas cosas’...

RC: No he mencionado un tema que es sumamente importante: los derechos humanos. Llegó un momento en que decíamos ‘derechos humanos nos coartan’; eso no es cierto, yo estuve en la calle, tienes que saber en qué momento utilizar la fuerza. Lo que tenemos que hacer permanentemente son procedimientos muy respetuosos de los derechos humanos. Lo otro es no permitir los pequeños insultos de grupos de gente a la ciudadanía. La política que decía Giuliani (y que hizo finalmente Bratton), la de las ventanas rotas, significaba impedir que la gente rompiera los vidrios para jugar, porque después iban a subir en la escala delincuencial. Lo que debemos hacer, porque vemos cada vez a más jóvenes delinquir, es atacar de frente la delincuencia y demostrarles que ser delincuente tiene un costo muy importante, tenemos que enseñarles que éste no es un lugar de libertades para el delincuente, esa es mi idea...

Pregunta: El Estado es más fuerte...

RC: Pero por supuesto que es más fuerte. Cuando la policía se repliega a sus cuarteles la delincuencia va a ocupar ese vacío. Yo a lo que vengo, creo que puedo poner a la corporación en el camino para cubrir los vacíos que la delincuencia ocupó; tenemos que salir y ocupar nosotros esos vacíos, hacer presencia y eso es lo que va a hacer que la ciudadanía se sienta segura, en ese momento empezará el cambio de la percepción. En cuatro meses no lo voy a poder modificar en gran parte, pero de que se va a notar, se va a notar.