Incomprendidos

Incomprendidos
Por:
  • rodolfoh-columnista

Cualquier tonto puede saber. El punto está en entender.

Albert Einstein

Y es más que obvio que casi todos los candidatos saben los problemas que aquejan a la ciudad, como los asaltos, el tráfico, la falta de agua, la contaminación, la corrupción… entre muchos otros; pero lo dramático está en que no todos entienden de soluciones.

Lo triste es que el nivel de los mensajes que envían a la ciudadanía es muy bajo, lo que me parece un insulto a nuestra inteligencia. Mikel Arriola, por ejemplo, tiene enormes ideas del tamaño de espectaculares, que ponen algo así como: “Acabaré con las arañas y las fotomultas”. Y entiendo que algunas personas hayan padecido abusos o injusticias por esas medidas, pero la verdad es que son las menos y eso no está ni de lejos entre las prioridades a resolver.

Supongo que alguien le habrá dicho al del PRI que ese tema vendería bien (incluso puede ser que sus frases de campaña hayan pasado por el filtro de un “grupo de enfoque”), pero bajo ningún parámetro es un mensaje inteligente. Hoy recuerdo haber visto un video de un experimento de este tipo de grupos de mercadeo, mismo que le aplicaron a unos estadounidenses para sondear las propuestas antimexicanas de Trump.

El entrevistador lanzaba sobre la mesa las propuestas más absurdas y los conejillos de indias tenían que discutirlas. Por ejemplo, una de las ideas que tuvo mucho éxito entre ellos fue el poner trampas para atrapar a mexicanos. Consistían en colocar contenedores, disfrazados de baños públicos, próximos a los centros donde muchos trabajadores indocumentados laboraban. El objetivo era que cuando los inmigrantes entraran a estos servicios, las puertas se cerraran herméticamente atrapando a las personas, para después remolcar el baño/contenedor hasta la frontera.

Así de idiotas y absurdas pueden ser las mentes de ciertas personas con ideas que supuestamente venden. Pero de ahí a trasladar esas propuestas a una campaña masiva en búsqueda del voto hay mucho trecho. Pero pues ahí está también la propuesta de Barrales de regalar dinero “Pa’ las jefas”. Así sin más, sin recato alguno, decidieron lanzarse a la compra del voto ofreciendo dinero y no soluciones.

No importa si lo que la gente pide es trabajo, seguridad o educación. Ellos decidieron que al ciudadano se le puede comprar como a cualquier mercancía. No han entendido el fondo de los problemas y eso les impide ofrecer alternativas de solución. No terminan de entender que no es lo mismo vender comida chatarra que ser empáticos con las aspiraciones, el enojo y los temores de las personas. Por eso a Morena y a sus candidatos les van tan bien.

Aquí, en la ciudad, y en todas partes había que hablar de la corrupción. Había que hablar del tráfico y de las marchas que nos desquician. Había que dolernos por los hijos sin trabajo y por la inseguridad en las calles. Eso mueve a la gente, no las arañas y las fotomultas.