La CDMX: bautizo seco

La CDMX: bautizo seco
Por:
  • horaciov-columnista

Hace unos días se dio el anuncio de la declaratoria de constitucionalidad de la reforma política del Distrito Federal y el pasado viernes 29 se celebró el evento de promulgación por parte del presidente de la República. Haya sido por los tiempos legislativos o por la agenda del presidente —supimos que anduvo muy ocupado por Medio Oriente y en el Foro Económico de Davós—, lo que me parece una mala coincidencia es que el pomposo evento de promulgación haya coincidido con los trabajos de mantenimiento del sistema Cutzamala, gracias a los cuales 14 de las 16 delegaciones del otrora Distrito Federal se han visto afectadas y miles de habitantes nos quedamos sin agua. Suministro que, por otra parte, no se ha restablecido del todo, y con suerte, el fin de semana apenas lo logrará. Y como la mala costumbre dicta, Iztapalapa, Tlahuac y las zonas altas de la ciudad siguen siendo las principales afectadas.

 Beneficios abstractos. En ocasiones anteriores me he referido en este espacio a las ventajas que le veo al cambio en la naturaleza jurídica del Distrito Federal (el proceso de creación de la Constitución, mayor autonomía frente al gobierno federal, plena responsabilidad política del jefe de gobierno en el nombramiento del procurador y jefe de la policía capitalinos, y formar parte del Constituyente Permanente para votar reformas constitucionales), pero ciertamente se trata de beneficios abstractos que en poco o nada sirven para mejorar la situación cotidiana de los que vivimos en esta ciudad.

 En cambio, molestias tangibles. Si de lo que se trata es que mejoren las condiciones de vida de los habitantes de la ciudad, lo que ocurrió el fin de semana largo fue una mala metáfora. El grandilocuente anuncio del “nacimiento” de la Ciudad de México (sí, con C mayúscula) tuvo como reacción una enorme inconformidad ciudadana por los cortes de agua. Ojo: en absoluto estoy sugiriendo que se debían de haber suspendido o aplazado

los trabajos de mantenimiento del sistema de distribución de agua; y hay que señalar que fue oportuna y ampliamente difundida la campaña que anunció los cortes en el suministro. Pero coincidió, pues, con que de parte del gobierno capitalino también se detonó masivamente la campaña de “adiós DF; hola CDMX”, y hasta se anunció algún absurdo mecanismo de absurda consulta para absurdamente pretender definir un nuevo gentilicio, porque como que el “mexiqueño” que propuso la Real Academia pareció no convencer (es, la verdad, muy feo), y por algún extraño motivo el universalmente usado y conocido “chilango” hay a quienes no les gusta. El punto es que, ante los cortes de agua, los creativos de las redes sociales tuvieron material para demeritar el bautizo de la ciudad, y más aún, la tontería del “debate” por el gentilicio. Me quedo con “sinagüenses” como la propuesta de gentilicio más irónica y precisa, que reflejó el humor de infinidad de capitalinos. Así que de “mi ciudad es chinampa en un lago escondido”… poco, muy poco, el fin de semana.

 Convocatoria constitucional. Mañana se aprobará por el Consejo General del INE la propuesta de convocatoria con la que se emitirán las etapas y procedimientos de cara a la elección de los 60 candidatos a diputados para la Asamblea Constituyente de la Ciudad de México (otros 40 serán designados). Será fundamental que los candidatos que provengan por la vía independiente —que tendrán que conseguir el apoyo ciudadano de aproximadamente 70 mil firmas—, cuenten con condiciones mínimas de piso parejo frente a los que propongan los partidos políticos, con todas sus prerrogativas y ventajas.

hvives@itam.mx

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