La corrupción y las complicidades

La corrupción y las complicidades
Por:
  • javier_solorzano_zinser

El desprestigio interminable en que han caído los gobernantes va más allá de memes o burlas, se ha metido entre los ciudadanos como forma de vida y ha provocado el repudio social y una abierta distancia con la política y, sobre todo, con los políticos.

El escarnio colectivo pasa por todos y no hay quien se salve, empezando por el Presidente. No ha sucedido nada que pudiera cambiar el estado de las cosas, todo se ha agudizado y se ha enquistado aún más.

En medio de la vorágine de la corrupción, el colmo ha sido que, sabiendo y reconociendo lo que ocurre, ciertos grupos se han dedicado a erosionar a las incipientes instituciones diseñadas para combatir la corrupción, como es lo que se ha vivido en el SNA.

Las reticencias, en estos casos, se convierten en complicidades. No se quiere cambiar y, cuando no hay de otra, el no hacerlo es dirigirse al repudio generalizado. Se termina por aprobar la creación de instituciones e instrumentos para luchar contra la corrupción, en favor de la transparencia y la rendición de cuentas para ser políticamente correcto y adaptarse.

Éste es uno de los ejes del problema. Gente que no quiere que cambie su statu quo, que sabe que cada vez es más difícil pasar por alto la corrupción.

La sociedad se ha convertido en quien vigila y denuncia. Los ciudadanos han impulsado el SNA, sin ellos el sistema sería un mazacote a modo.

El otro gran problema que tenemos con la corrupción como forma de vida es lo que provoca socialmente, sobre todo entre niños y jóvenes. Lo que han visto de los políticos los lleva a no entender el sentido que tiene la política y el papel que juegan los gobiernos en sus vidas.

Todos los signos que los rodean son contradictorios. En lugar de que se premie y aliente la lucha contra la corrupción, ésta termina por desalentarse.

No hay indicadores de cambio y mientras no vean diferencia en su entorno inmediato todo seguirá siendo lo mismo.

¿Qué puede pensarse en la sociedad si después de años de colocar a Javier Duarte como el ejemplo más alto de la corrupción termina por quedar en libertad? ¿Qué puede pensarse si Tomás Yarrington se queda en Italia, si Roberto Borge acaba en Panamá y si César Duarte no es detenido?

¿Qué puede pensarse si son deportados pero al llegar al país quedan en libertad, como tanto se especula en el caso Javier Duarte?

¿Qué puede pasar por la cabeza de una niña o un joven, con la mucha o poca información que tenga, cuando ve que personajes acusados de la más vil de las corrupciones e integrantes de la clase política de su país quedan en libertad o con sentencias menores?

¿Queremos cosas nuevas? Pues entonces hagamos cosas nuevas. Erosionar el SNA, el cual hoy se pone en marcha a pesar de sus detractores, es dejar de pensar en el futuro. Es dejar que los niños y los jóvenes sigan creyendo que la vida es así, cuando no debe ser como hoy es.

 RESQUICIOS. Así nos lo dijeron ayer:

En el INE ya terminó el proceso de fiscalización de la elección. La decisión de ayer deja establecido que pase lo que pase en los próximos días el rebase de los gastos de campaña no va a disminuir, más bien podría aumentar. Al TEPJF le corresponde la decisión de anular la elección de Coahuila. Lo que es un hecho es que con base en la fiscalización la ley fue violada.

Pamela San Martín. Consejera INE.

El documento que presentó ayer EU para la renegociación del TLC debe pasar primero por el Congreso norteamericano. Es un texto que lo veo dividido en dos partes. Por un lado la introducción, en que se ratifican las críticas de Trump, hasta parece que él lo hizo. La segunda parte tiene otro sentido, invita a la discusión sobre el tratado para los tres países.

Luis de la Calle. Dr. En economía.

solorzano52mx@yahoo.com.mx

Twitter: @JavierSolorzano