La justicia en Tamaulipas puede esperar...

La justicia en Tamaulipas puede esperar...
Por:
  • monica-garza

El fin de semana pasado en Nuevo Laredo, Tamaulipas, luego de una denuncia anónima, las autoridades municipales rescataron a un joven con discapacidad que se encontraba solo y encadenado en el cuarto oscuro de una casa habitación.

“Tenlo por seguro que nosotros vamos a proceder por la vía legal hasta donde sea posible... Habrá que esperar a que la familia nos dé la información de por qué motivo tenían a ese niño en esas condiciones”, dijo Sergio Octavio García Garza, procurador de la Defensa del Menor del DIF Tamaulipas.

Fue su primera declaración frente al hallazgo del menor encadenado y el primer mal síntoma del proceso, ya que no existe ninguna circunstancia que justifique “por qué motivo” alguien encadena y encierra en un cuarto sin luz a un ser humano. Mucho menos si se trata de uno con discapacidad.

Por otro lado, la madre de la víctima, una vez que apareció y fue interrogada, fue sometida a una evaluación en la que el personal del centro de salud mental de Nuevo Laredo determinó que padecía otro tipo de trastorno emocional.

[caption id="attachment_716946" align="alignnone" width="709"] El menor fue encontrado por las autoridades gracias a un reporte anónimo.[/caption]

Aunque eso no la exime de la responsabilidad por el maltrato al que sometía a su hijo. Ella lo ha justificado diciendo que “lo encadenaba para que no se saliera de la casa cuando ella tenía que irse a trabajar”.

Sin embargo, ese argumento sí está siendo considerado por la autoridad local, encargada de la defensa del menor para decidir darle o no al caso la perspectiva de maltrato infantil.

“La señora vive sola con su mamá discapacitada, está enferma, se quebró la cadera, un hijo discapacitado, ella tiene que ir a trabajar y ¿qué hace cuando un hijo se le sale y sabe que no va a estar bien? Pues hace eso (encadenarlo)”, me dijo en entrevista el procurador Sergio Octavio García, para el noticiero Es de Mañana de ADN40.

Y cito textual el resto de nuestra conversación:

—En la denuncia que van a interponer ¿hablarán de maltrato?

—Sí, es probable que así sea.

—¿Es probable?

—Bueno, lo que pasa, vuelvo a repetirte, Mónica, necesito tener a la mano, los elementos suficientes para determinar qué tipo de denuncia vamos a presentar.

—¿Para usted lo más importante es el menor?

—Claro, indiscutible.

—Entonces es indiscutible que hay maltrato...

—Es probable que lo hay, te repito, desde el momento en que está encadenado.

—¿Es probable? Perdón, procurador, pero estamos viendo las imágenes de un joven encadenado en oscuridad total, con todo respeto se lo digo, no es probable, es un hecho que tenemos un caso de un joven con un maltrato y peor aún si es un joven con un tipo de discapacidad.

—La denuncia la vamos a presentar, y lo dije hace ratito, lo que sucede es que para mí es más importante la atención de ellos. Tenemos tiempo suficiente para presentar la denuncia correspondiente en su momento.

La Ley General de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes decretada en 2014, de acuerdo a lo que señala en su artículo 47, deja en manos de cada estado, según sus leyes y protocolos, la aplicación de justicia para los menores en cualquier caso, entendiéndose por ello el descuido, negligencia, abandono o abuso físico, psicológico o sexual.

Aquí la gran desgracia es que en Tamaulipas —como en la mayoría de los estados— el delito de maltrato infantil no sólo no está tipificado como grave, sino que ni siquiera existe en su código penal.

Por lo tanto no se persigue de oficio, para ello tiene que haber una querella de por medio ante el Ministerio Público, que en el caso particular del joven encontrado encadenado en Nuevo Laredo le corresponde hacer al procurador de la Defensa del menor del DIF, Sergio Octavio García Garza.

Pero el funcionario tampoco parece tener prisa para que el Ministerio Público proceda a dictar las medidas cautelares para garantizar la futura integridad física y psicoemocional del joven encontrado encadenado, y vuelvo a citar:

—¿Cuándo piensa presentar la denuncia?

—Tan pronto tengamos la posibilidad de hacerlo, ahorita yo ando en Ciudad. Victoria, regresando vamos a platicar para hacer eso... Yo ando en un curso ahorita en Cd. Victoria y en su momento se hará”.

¿Así o más claro?... En Tamaulipas la justicia para un menor de edad en condición de discapacidad y maltrato, puede esperar... ¡Qué desastre!.