Las tarjetas de crédito y el historial crediticio

CARTA DE PRESENTACIÓN.

¿Las tarjetas de crédito forman parte de los historiales de Buró de Crédito? Así es, las tarjetas de crédito son uno de los productos del sector financiero que se ven reflejados en el historial crediticio donde aparecen tanto los pagos puntuales como los atrasos.

¿Y las tarjetas adicionales? También forman parte del historial crediticio, pero del titular de la cuenta. Por ejemplo, digamos que un esposo le da una tarjeta adicional a su esposa y a su hijo que va a la universidad. El titular de la cuenta es el esposo y éste es el responsable de los gastos que generen esas tarjetas adicionales; por ende el que tiene el historial es el esposo y no la esposa o el hijo.

Imaginemos que el esposo fallece; las tarjetas se tendrían que cancelar. Una vez que se presenta la solicitud de cancelación el banco rechazará cualquier disposición que se pretenda realizar a través de la tarjeta, cancelará el pago de los servicios domiciliados, y no se podrán hacer nuevos cargos.

El banco también actualizará la información del acreditado en Buró de Crédito.

Cuando recibe la notificación del deceso, Buró de Crédito incluye una leyenda en el área de “Mensajes” del historial crediticio del padre, en este ejemplo, indicando que “Buró de Crédito tiene registrada fecha de defunción”. Así se previene que un defraudador busque obtener un financiamiento usando la identidad de una persona fallecida.

Para saber qué sucede si un acreditado fallece es importante leer todas las cláusulas cuando se contrata un instrumento de crédito, especialmente si se comparte el producto con adicionales, o en caso de que haya obligados solidarios, etc. También hay que fijarse en las cláusulas que tengan que ver con los seguros, liberación de saldos por fallecimiento, régimen del saldo por fallecimiento, seguros sobre saldos o liberación de saldo insoluto por fallecimiento, entre otros.

Ahora pensemos que la esposa tiene que pagar la colegiatura del hijo y ya sin tarjeta de crédito se le dificulta porque la sucesión testamentario del esposo apenas está en trámite y no tiene los recursos disponibles para hacerle frente al gasto de la universidad.

La clave para no quedarse sin tarjeta en un escenario así es que cada integrante de la familia cuente con su propia cuenta y, obviamente, con su respectivo historial crediticio.

Si algún integrante de la familia no percibe un sueldo, lo más recomendable es que quién si lo haga le deposite una cantidad fija cada mes en una cuenta bancaria; así, en unos meses, el banco puede tomar este ingreso como un sueldo y puede ofrecerle al titular de esa cuenta su propia tarjeta de acuerdo a su perfil y capacidad crediticia.

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