Lo mínimo para votar

Lo mínimo para votar
Por:
  • larazon

Manuel López San Martín

Ante la creciente ola pro abstencionista y anulista para la elección del próximo domingo 7 de junio, más de un partido y político responde con desdén a la ciudadanía. Hay quienes lejos de preocuparse por la pérdida de legitimidad que conlleva un bajo nivel de participación, lucen cómodos con un escenario donde el nivel de votación puede ser menor al 40%. El desinterés de la clase política hacia los ciudadanos, no es nuevo. La constante ha sido una brecha que se ha abierto entre políticos y ciudadanía. Sólo en campañas, la gran mayoría se acerca a sus electores. Unos pocos se mantienen presentes después, rindiendo cuentas. El resto no vuelve a aparecer sino hasta el siguiente proceso electoral.

Por eso, más allá de colores y partidos, vale la pena fijar condiciones mínimas para votar en los próximos comicios. De entrada, e incluso antes de revisar sus propuestas, habría tres aspectos que considero básicos, pues sin ellos, cualquier candidato no es siquiera un poco confiable y, por tanto, lo que proponga y como lo proponga es lo de menos.

Primero, elegir sólo a aquellos que hayan presentado su 3 de 3: declaración patrimonial, fiscal y de intereses. Sólo quienes transparenten su patrimonio y hagan público su historial fiscal y sus posibles conflictos de interés, son mínimamente confiables. De otra forma, ¿cómo saber con qué llega al cargo el político electo?, ¿cómo estar seguros de que podremos fiscalizarlo terminado el cargo? Saber con cuánto llega a una posición, es tanto o

más importante que conocer con qué se va.

Segundo, votar sólo a quienes se tomen la molestia de contrastar ideas con otros candidatos y partidos. Quienes rehúyen al debate exhiben, además de miedo, limitaciones para poner en la balanza sus ideas y que sean ponderadas por los ciudadanos. Debatir es creer en la deliberación pública y en la rendición de cuentas de cara a quienes quieren representar. Quien le da la vuelta al debate demuestra desdén a la ciudadanía que debe poder tener toda la información para emitir un voto razonado.

Tercero, apoyar solo a quienes interactúen en redes sociales y respondan a quienes los cuestionan. Si ni en campaña los candidatos son capaces de generar una conversación con sus electores y se empeñan en sólo postear comentarios huecos o —en el peor de los casos— en bloquear a quienes los critican, nada hace pensar que una vez en el cargo voltearán la mirada a quienes los eligen. Sencillo: quien se muestre incapaz de dialogar con los ciudadanos que busca representar, no merece representarlo.

El próximo 7 de junio, más allá de colores y partidos, haríamos bien los ciudadanos en elevarles la vara a los políticos. Quienes no sean confiables, aquellos que no transparenten su patrimonio y hagan pública su declaración patrimonial, fiscal y de intereses, quienes no debatan ni estén abiertos al diálogo y contraste de ideas, no merecen el voto. Debe haber consecuencias al desinterés de los políticos para quienes pagamos su sueldo.

Elijamos sólo a aquellos que se hayan tomado la molestia de mostrar que son probos, honestos y que no llegarán al cargo para lucrar con él o enriquecerse. Tenemos derecho a conocer con qué llegan para después revisar con qué se van. Votemos sólo a quienes sean mínimamente confiables. Y si los políticos no se sienten cómodos siendo examinados, pueden dedicarse a otra cosa.

  Off the record... Candidatos vemos, escoltas no sabemos. El candidato a diputado local del PRI-Verde y ex delegado en Cuajimalpa, Adrián Rubalcava, se hace acompañar de, por lo menos, cinco elementos de seguridad en sus traslados. Su compañera de partido, la candidata a delegada en Cuauhtémoc Alejandra Barrios, no canta mal las rancheras, pues trae seis escoltas bien uniformados con chaleco beige. ¿De qué —o de quién— se cuidan? El miedo no anda en burro… Al que cada vez menos toman en serio es al ex perredista y ahora vocero de la campaña de Ricardo Monreal, Agustín Guerrero. Cuando anunció su renuncia al PRD sólo su familia lo acompañó, y ahora que pidió la destitución del secretario de Gobierno del DF, Héctor Serrano, llegó con no más de 20 personas a “poner presión”. Si lo que quería era enseñar músculo, le salió el tiro por la culata… Decisión tomada en el GDF: el Jefe de Gobierno Miguel Mancera no acudirá al cierre de campaña de los candidatos del PRD en el Zócalo este domingo…

 En boca cerrada... “Aquí está, no es un invento”.

El presidente del PRD-DF, Raúl Flores, al exhibir una propiedad con valor de 5 millones de pesos que el candidato de Morena a jefe delegacional en Cuauhtémoc, Ricardo Monreal, “olvidó” dar a conocer cuando presentó su declaración patrimonial.

Twitter: @MLopezSanMartin