Lydia Cacho, Monreal… la violencia del insulto

Rubén Cortés

Lydia Cacho escribió un texto sobre el gobernador de Quintana Roo (http://www.eluniversalmas.com.mx/editoriales/2013/09/66329.php), argumentado con alusiones físicas a Roberto Borge que sólo degradan el lenguaje. La articulista debe saber que, si se degrada el lenguaje, se degrada al periodismo.

Ricardo Monreal afirmó la semana pasada que “entre la noche del viernes próximo y la madrugada del domingo las policías federal y del DF reprimirían a los maestros plantados en el Zócalo, con tanques, gases y chorros de agua, bajo la dirección personal del presidente Enrique Peña”.

El diputado de Movimiento Ciudadano sabe que los legisladores tienen el fuero acotado y están sujetos a procesos penales por difamación: tan lo sabe que su partido fue el único que se opuso a votar el dictamen aprobado por la Cámara de Diputados por 376 votos contra 56.

Claro que Lydia Cacho sabe que degrada el lenguaje y Monreal que es mentiroso. Pero creen que la ideología de izquierda que enarbolan los recubre de pureza y autoridad moral y los coloca, en automático, del lado justo de la historia.

“Regordete presuntuoso”, “botarga puño de hierro”,  “a su padre lo encarcelaron por fraude fiscal”, “a todas partes viaja con su compañera Gabriela Medrano, la joven diputada federal del Partido Verde”… de ese nivel son las referencias de Lydia Cacho sobre Borge.

Enfatiza las características físicas (en muestra de desprecio y odio) y en que se haga acompañar de una mujer “a todas partes”, siendo que Borge es casado (en una muestra de intromisión en la vida privada de las personas), lo cual entra en el terreno de los infundios.

Para criticar, Lydia Cacho argumenta para convencer sin razonamientos, lo cual debería estar excluido, por pura honestidad, pues no ayuda ni a entender, ni al entendimiento, ya que Lydia Cacho lo que tiene es un problema personal con Borge.

¿Por qué? Porque Borge canceló un presupuesto del erario al Centro Integral de Atención a las Mujeres en Cancún, fundado por Lydia Cacho. Borge consideró que el CIAM no transparentaba el uso de los recursos. ¿Te pego para que me pagues? ¿Por eso los insultos al gobernador?

Similar facilismo usó Monreal para asegurar que “entre la noche del viernes próximo y la madrugada del domingo, el Presidente dirigiría  personalmente el operativo de desalojo de los maestros y en función de los resultados, presentará su mensaje a la población, en cadena nacional”.

Otra mentira, como cuando contrató a una persona para que se hiciera pasar por Luis Videgaray, en un montaje de audio, así como de “copias” de un pago interbancario para “sustentar” la “triangulación”, “lavado de dinero” y “evasión fiscal” entre Scotiabank y el Edomex.

Lydia Cacho y Monreal tienen que saber algo:

El insulto es violencia.

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