Maradona, el personaje

Maradona, el personaje
Por:
  • jorgeernestow-columnista

La llegada de Diego Armando Maradona a Dorados ha levantado ámpula en el medio mexicano, que lo mira casi con resentimiento.

El “troleo” al argentino es intenso. Buena parte brota de fanáticos jóvenes que no lo vieron jugar, pero sí han visto sus constantes desfiguros y escándalos. Incluso, periodistas se han convertido en médicos y especialistas en el tratamiento de adicciones y hasta se animan a diagnosticar que al “pobre hombre” no hay que dejarlo trabajar, sino encerrarlo en una clínica. Bochornoso espectáculo mediático, digno, ciertamente, de lo que han sido los últimos 20 años de vida de aquel astro que maravillara al planeta con la pelota en los pies.

Queda claro que en Dorados, que a mitad del Apertura 2018 aún no ha podido ganar un partido y estaba por enfilarse a otro semestre de irrelevancia deportiva e institucional,  decidieron hacer una apuesta alta y peligrosa, lo que no deja de ser normal, si se considera que justamente eso, las apuestas, son una de las industrias que con pericia manejan los dueños del equipo.

Contratar a Maradona tiene efecto inmediato en la repercusión que genera y ha permitido que el equipo Dorados –que tenía rato en la total intrascendencia– aparezca una vez más en el mapa del futbol nacional, informativamente casi como si hubiera ascendido a Liga MX. Ni hablar de lo que internacionalmente genera este vínculo contractual.

Obviamente, a Sinaloa no llega un entrenador de élite sino un ilustre motivador que pretende ser director técnico, pero carece de los atributos necesarios para serlo; pero sobre todo, llega un personaje incendiario, una auténtica granada con el seguro flojo, que amenaza con estallar al mejor movimiento equivocado.  Maradona, con las evidentes secuelas de sus excesos impidiéndole comunicarse mejor verbalmente, pretende relanzar su lastimada carrera y alejarse de los excesos.  Apenas en el Mundial de Rusia 2018 quedó claro que aún tiene mucho qué hacer en ese rubro. Esta es una nueva oportunidad; ya ha tenido muchas. Ojalá esta vez la aproveche, aunque con el Maradona exfutbolistas los partidos nunca duran 90 minutos…siempre acaban mal y antes de lo previsto.

[caption id="attachment_797677" align="alignnone" width="1068"] Diego en una plática con sus jugadores, ayer.[/caption]