Morena y Tláhuac… ese tufo del narco

Morena y Tláhuac… ese tufo del narco
Por:
  • ruben_cortes

Morena aceptó que su delegado en Tláhuac rinda cuentas en la ALDF por el narcotráfico en su demarcación, pero quería que esto fuera a puertas cerradas. Se entiende que Morena no quiera exponer a Rigoberto Salgado, porque es un personaje que se ha movido en lados oscuros de AMLO.

Imposible olvidar que Salgado fue el jefe de policía en Tláhuac que dejó correr el tiempo para que una turba quemara vivos a dos agentes federales el 23 de noviembre de 2004, siendo AMLO Jefe de Gobierno del DF, y Marcelo Ebrard su titular de la SSP.

Con Salgado, Tláhuac se convirtió en base principal del narcomenudeo en la CDMX, con 64 homicidios en los últimos meses, además de la captura allí de seis escoltas de Dámaso López Serrano, El mini Lic, compadre y socio de El Chapo.

Pero el destape de la cloaca de Salgado se registró hace una semana, cuando las cámaras de la PGJ de la CDMX guiaron a agentes de la Marina a eliminar en 15 minutos y con 110 balazos al capo de Tláhuac, conocido como El Ojos, y a siete de sus sicarios.

Los diputados de la CDMX exigen ahora al delegado que les rinda cuentas, pero su partido insistió en que fuera en sesión privada. ¿Por qué Morena quiere ocultar de la ciudadanía lo que sabe su delegado en Tláhuac del mayor centro de narcomenudeo en la capital?

Pero tampoco se puede olvidar que el exalcalde vinculado al narcotráfico José Luis Abarca huyó de Iguala, bastión de Morena, y fue capturado el 4 de noviembre de 2014 en Iztapalapa, otro bastión de Morena a través, en ese momento, del delegado Jesús Valencia, gente de Marcelo Ebrard.

Abarca y su esposa, María de los Ángeles Pineda (quienes ordenaron al cártel de Los Rojos desaparecer a 43 estudiantes normalistas en Iguala), escaparon de un bastión de Morena. La propia Pineda era candidata a suceder a su esposo y aparecieron en otro también controlado hasta 2015 por Morena.

El narcotráfico es uno de los asuntos nunca bien manejados por AMLO:

impulsó a Abarca como alcalde, mediante su operador Lázaro Mazón, quien negoció con el entonces gobernador Ángel Aguirre para postularlo, aunque había perdido la encuesta para la nominación ante Óscar Díaz Bello.

Díaz Bello y seguidores se quejaron ante AMLO y éste les respondió: “En la democracia siempre hay inconformidades, vamos a unirnos para salvar al país”. Después, se hizo una fotografía abrazando a Abarca. AMLO también hizo candidato a gobernador a Mazón, pero lo quitó tras la caída de Abarca.

Y ahora no querían que Salgado informara sobre el narco en Tláhuac a puertas abiertas en la ALDF, pero al final perdieron la discusión. No, no maneja bien el tema del narco.

Se le complica.

Twitter: @ruben_cortes