Oootra consulta, en materia educativa

Tras la presentación del discrepante dictamen técnico sobre si debe o no continuar el avanzado proyecto del Nuevo Aeropuerto Internacional de México o se construyen dos pistas en la base militar aérea de Santa Lucía, como lo ha propuesto el Presidente electo, y éste anunció que la decisión será la que resulte de una consulta pública en la que “el pueblo soberano opine” lo que deberá hacerse, se anuncia oootra, ahora en materia educativa.

En ambos casos el mismo Andrés Manuel López Obrador ha anticipado públicamente su opinión personal: en uno, que se cancele la obra de la nueva terminal aérea, por la cuantiosa inversión y que se opte por su propuesta y, en otro, que en cuanto asuma la Presidencia enviará una iniciativa al Congreso de la Unión para cancelar la Reforma Educativa, que se aplica en la mayoría de los estados.

DE ESTO Y DE AQUELLO

Al participar por primera vez como Presidente electo en un Congreso Nacional del Movimiento de Regeneración Nacional que fundó hace cuatro años, Andrés Manuel López Obrador dirigió un claro mensaje a sus militantes al advertirles que lo que él quiere es “gente dispuesta a heredar pobreza a sus hijos, pero no deshonra”.

Instó a consejeros nacionales, legisladores electos y funcionarios públicos propuestos para formar parte de su gobierno, que no se encaramen al poder y se dejen seducir por una ambición que destruya el proyecto político de Morena, que es formar jóvenes para el futuro en el “que no haya influyentismo, corrupción, amiguismo, sectarismo o nepotismos, que son las lacras de la política”.

En ese evento presentó su propuesta de Planes de Acción para respaldar su Proyecto de Nación, así como el de Austeridad Republicana y Combate a la Corrupción, para los que pidió apoyo a diputados y senadores electos, a los que dijo que “no escuchar y taparse los oídos, ponerse cera en los oídos y no escuchar el canto de las sirenas y no olvidar que el poder sólo tiene sentido cuando se pone al servicio de los demás”.

Por cierto que las semanas transcurren sin que el próximo Presidente ni quien será su secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, hayan emitido opinión alguna sobre la condena de los partidos políticos latinoamericanos de izquierda, en el Foro de Sao Paulo, al gobierno de Daniel Ortega en Nicaragua, envuelto en la represión, encarcelamiento de opositores y éxodo de miles de nicaragüenses que huyen de violencia y hambre.

A ese foro, que se realizó en La Habana el 17 de julio pasado, asistió la presidenta nacional de Morena, Yeidckol Polevnsky, quien tampoco ha hecho alusión alguna a lo que se discutió y aprobó, dedicada como ha estado en festejar el triunfo electoral de AMLO.