Piden no despreciar potencial de PF

Piden no despreciar potencial de PF
Por:
  • bibiana_belsasso

La Policía Federal, a través de sus distintas etapas, está cumpliendo 90 años. Una institución con tareas importantísimas para el resguardo de la seguridad en el país.

A lo largo de los años la Policía Federal ha ido evolucionando para adaptarse a los grandes desafíos que se presentan en México.

Hemos visto muy de cerca el trabajo de la Policía Federal en la última década. Con ellos hemos realizado para Todo Personal y esta columna reportajes especiales en los puntos más violentos del país. Hemos estado en distintos operativos, en Michoacán, Tijuana, Tamaulipas, Chihuahua, Guerrero y Nuevo León, en los momentos más críticos.

También hemos platicado con los mandos quienes a lo largo de los años nos han mostrado las necesidades de seguridad del país y cómo se trabaja.

Con motivo de estos 90 años, Manelich Castilla, comisionado general de la Policía Federal, nos dice: “Esta Policía no es producto de los últimos meses o el último año; es una evolución muy significativa con el nuevo modelo policial que inició desde la administración anterior y que ésta respetó y apoyó para que siga creciendo. Ése es el llamado que hemos hecho: que muy al contrario de pensar en reconstruir, hay que pensar en analizar y seguir empleando el potencial de esta Policía”.

Sobre la situación que hoy vive la Policía Federal, Manelich Castilla comentó que en la actualidad se cuenta con un “estado de fuerza de 38 mil hombres y mujeres, divididos en siete ámbitos de especialidad, que van desde la División Científica, Antidrogas, la Investigación de Delitos Federales, la División de Fuerzas Federales, que son nuestros especialistas en administración del uso de la fuerza; Seguridad Regional, División de Gendarmería, que está especializada en la tutela de ciclos productivos; tenemos una división que tiene en particular algo muy importante, la Científica, que es el pilar sobre el que recae el 80 por ciento de las investigaciones en materia de cibercriminalidad y que tiene un reconocimiento enorme; tenemos una unidad de Asuntos Internos, una Secretaría General”.

Existe un tema en el que se ha insistido por años y es el de “exportar” el modelo de la Policía Federal a las policías estatales, ya que el problema grave de seguridad radica en gran parte en que, en la mayoría de las entidades, las Policías Estatales no están plenamente capacitadas para responder a los desafíos que tienen.

[caption id="attachment_772667" align="alignnone" width="1068"] Exhibición de la Policía Federal el 16 de julio. Foto: Especial[/caption]

Sobre este aspecto, Castilla nos comentó que se tiene que replantear el Mando Único: “creemos que es una posibilidad de construir una buena base a nivel nacional para realizar mejores operativos (…) en el Mando Único hay controles, los tramos de responsabilidad están bien definidos y es más fácil auditar la operación policial en donde existe un solo mando a como estamos hoy, que estamos cerca de mil ochocientas policías tratando de hablar un mismo idioma cuando no todas están en condiciones de hacerlo”.

Acerca de las policías locales que están realizando una muy buena labor como la de Tijuana, León, o Monterrey, aseguró: “donde se está funcionando de manera correcta no tendrían que dejar de hacerlo, hay que darnos esa oportunidad, hay que analizar a profundidad las bondades de este modelo. No puede ser que tengamos clara la debilidad que genera facilidades a las actividades del crimen organizado y no reaccionar de manera contundente ante esta realidad, entonces, más allá de que pueden explorarse otros mecanismos, asumo el Mando Único como el más acabado, está muy bien estudiado, está diseñado, está planteado, lo que falta es darse la posibilidad de verlo funcionar”.

En cuanto a la justicia cívica, mencionó que “hay una cantidad importante de cosas que tendrían que analizarse a la luz de un modelo como éste y de la mano del Mando Único rescatar lo que el comisionado Renato Sales ha estado señalando, la cultura cívica, los juzgados cívicos, esas conductas que empiezan a distorsionar el entorno, que van desde la agresión doméstica hasta el consumo exacerbado de alcohol en la vía pública, y que hoy están en total abandono, pareciera que ya no existe la justicia cívica, entonces, vamos a hablar de qué se puede hacer hacia adelante, hay muchas posibilidades de pensar en qué se puede lograr”.

Durante la entrevista, Manelich reconoció el trabajo de toda la corporación, incluyendo los cerca de 400 elementos en servicio que entregaron su vida en el cumplimiento de su deber sin dejar de lado las muertes asociadas a la función policial que pasan inadvertidas por la presión a la que están sometidos los elementos. “No porque no hayan muerto bajo el fuego de la delincuencia son ajenos a entregar su vida por el servicio”.

En el marco de estos 90 años de la Policía Federal, es importante reconocer el trabajo y la aportación de los todos los que han tenido la oportunidad de encabezarla. Hemos platicado con Genaro García Luna, secretario de Seguridad Pública durante todo el sexenio de Felipe Calderón, y esto nos decía durante su gestión: “La prioridad es tener una policía institucional, una policía con método, científica, que tenga la capacidad técnica para combatir al crimen, que sirva a la sociedad y esto implica un nuevo paradigma en la visión, en la operación policial y, por supuesto, la convicción, el esfuerzo total, no hay reversa; las etapas, los programas que tenemos para estos indicadores implican esta evolución. Son dos caminos: una policía desplegada con 500 puntos en el país, donde tenemos oportunidad de ver directamente a la comunidad, dar respuesta a la comunidad, una víctima de lo que sea, de un robo, de un asalto, de narcomenudeo y unidades centrales con capacidad superior e inteligencia, para combatir la estructura criminal”.

Quien también encabezó la Policía Federal ya en la administración del Presidente Enrique Peña es Enrique Galindo, quien nos contó cuando estuvo al mando: “La Policía Federal se vuelve una escuela en la que hoy vale mucho la pena fijarse como proyecto de vida, el país se está transformando y las policías, todas, deben estar a la velocidad de como evoluciona la sociedad, la cultura y el propio gobierno, cuando el Presidente dice: ‘Quiero un México en paz’, lo que está instruyendo a la Policía es el mayor número de capacidades que no generen mayor violencia, sino que generen paz. Inteligencia, coordinación, mayor investigación, profundidad en las acciones, no necesariamente las armadas, sino en las acciones de investigación, nosotros debemos cambiar la actitud de policías hacia una Policía de mayor servicio, de mayor responsabilidad, de mayor respeto a los derechos humanos, no de discurso, sino de hecho. Hoy el Mando Único es la mayor expresión de acuerdo entre las policías municipales y estatales para obtener un mando coordinador”.

El trabajo en la Policía Federal debe tener continuidad. Es verdad, hay muchas cosas que se pueden mejorar, pero la base de lo que hay es muy buena y se ha podido construir a lo largo de muchos años.

Manelich Castilla nos decía: “las grandes policías del planeta se deben a dos cosas: una, que logran transitar a pesar de lo que sucede en el entorno institucional distinto al ámbito de seguridad; tenemos policías que han visto diferentes regímenes de gobierno, que han pasado inclusive por dictaduras y que han vuelto a restablecer la vida a la práctica, si tú no construyes una policía pensada en los próximos 100 años, como la mayoría de las policías de la región, estamos construyendo instancias temporales que no responden a la necesidad”.

“Uno de los más importantes pilares que tiene una institución es su doctrina, una institución es tan grande como su historia. Es decir, hay que revisar la historia para ver qué importante es contar con estos asideros”.

La Policía Federal es de las instituciones que se deben preservar. Una de las pocas que se han construido transexenalmente.