Presunto culpable

Presunto culpable
Por:
  • Carlos Urdiales

El caso de seis (tres en la consignación del presunto responsable) menores de edad abusados sexualmente en el kínder Matatena Montessori de la Ciudad de México abre, una vez más, la caja de Pandora de un sistema judicial que está por expirar, del papel de los medios de comunicación convertidos en oficialía de partes del MP, y hace mayúsculas las dudas sobre el éxito que tendrá el nuevo sistema penal acusatorio, el cual entra en vigor en junio próximo luego de ocho años de implementación.

Un colegio con 15 años de trayectoria sin mácula conocida, sus dueños, Rafael Duarte (administrador y presunto culpable) y Patricia Guitián (propietaria), son matrimonio, padres de un niño con síndrome autista que buscaron dar a menores con discapacidades y patologías diversas una atención educativa como la que no encontraron en su momento para su hijo.

Sin antecedentes formales, el escándalo estalló. Pocas imágenes pueden lastimar más al conjunto social que la de menores abusados sexualmente, uno de ellos con síndrome de Down más todavía, si es que eso es posible.

Otro caso fantástico para el seguimiento periodístico y su rentabilidad en audiencia, lectores y seguidores.

Litigar en los medios y no en tribunales, por temibles que sean por su profunda corrupción, garantiza escándalo, nada en términos jurídicos, nada de justicia, asegura el morbo de miles que se suman, opinan y linchan socialmente a quien se atraviesa por la plaza pública virtual de las redes, donde el derecho de réplica no existe, donde los dogmas imperan.

Las autoridades sucumben ante la presión mediática y social. El pasado lunes en entrevista para Grupo Fórmula la propietaria del kínder, su abogado y, vía telefónica, el esposo y presunto agresor, Rafael Duarte, comparecieron ante el tribunal mediático, y aseguraron ser inocentes. ¿Se imagina lo contrario?

Episodio memorable, al aire y en vivo, la Procuraduría de Justicia de la CDMX le informó al equipo del programa de Ciro Gómez Leyva el resultado del examen que peritos cibernéticos de la PGJ realizaron a la computadora de Rafael Duarte, asegurada para analizar rastros y nexos con pornografía infantil.

El resultado difundido en vivo fue: nada. Nada encontraron los detectives, el suspiro de alivio del presunto inocente ¿o culpable? fue punto climático. ¡Qué bueno!, exclamó Rafael Duarte y reiteró, a preguntas puntuales, que nada de lo que se le acusa es verdad.

La entrevista terminó con alusiones y esperanza de que este caso no siga los pasos de una película que, sobre el tema de violación a menores, sugiere una suerte de psicosis colectiva, contagiosa, capaz de condenar a inocentes.

Ayer detuvieron a Rafael Duarte Pereda, está consignado en el Reclusorio Oriente, corre el plazo legal de hasta 144 horas para que un juez (de tribunal) determine su situación jurídica, no mediática. Puede alcanzar hasta 37 años de cárcel. Pan y circo.

urdiales@prodigy.net.mx

Twitter: @CarlosUrdiales