Queda el panorama verde

Entre las contaminaciones que afectan a la ciudad, la visual tiene el inconveniente de que nadie la mide. No existen instrumentos ni metodologías que reporten grados de esa contaminación, pero ahí está y la padecemos.

En cualquier ruta aparecen las vistas desagradables, caóticas, carentes de orden o estética: basura regada en calles, parques, camellones y barrancas; muros y monumentos ofendidos con excéntricos grafitis; luces, sobreinformación y mil estilos arquitectónicos; pegotes que tapan los señalamientos viales y qué decir del exceso de espacios publicitarios, fijos y móviles. Lo bueno es que en estos días el paisaje urbano luce más verde, gracias a la vegetación y a los futboleros que visten con la camiseta de moda.

Fotografía: La ciudad de México es el escenario de otra contaminación: la visual, donde miles de anuncios espectaculares y señalamientos vehiculares saturan el espacio y lo vuelven caótico.

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