Telmex y el regreso del Jefe Diego

Aún no hay un información oficial ni reporte a la Securitie Exchange Commission, pero corre a todo lo que da la versión de que Diego El Jefe, Fernández de Ceballos, se incorpora al equipo de Telmex-Telcel, para lograr que la Suprema Corte de Justicia le favorezca para mantener sus tarifas de interconexión, y pequeña cosa, revertir la multa de casi mil millones de dólares que le quiere aplicar Eduardo Torquemada Pérez Motta a las firmas de Carlos Slim.

Todo indica que el Marqués de Escobedo regresa a los negocios. Ciertamente no es un especialista en telecomunicaciones ni tampoco en competencia. Para eso está Rafael Robles Miaja, quién habría tomado temas corporativos a petición, se dice de Javier Mondragón, el multifacético director jurídico de Telmex. Pero sí algo tiene Fernández de Ceballos son las relaciones políticas para incidir en el ánimo de diversos magistrados del órgano de estado que preside Juan Silva Meza, independientemente de que El Jefe Diego tenga una maltrecha relación en Los Pinos.

Por supuesto que el Jefe no cobra barato. Antes de su secuestro la leyenda urbana le atribuía un guante de un millón de dólares sólo por iniciar el tratamiento del algún “asunto”. Quien sabe cuál sea ahora su tabulador. No sería mala idea que, de validarse el hecho, se informe de ese costo a los inversionistas minoritarios en los archivos EDGAR de la SEC, que dirige Mary Shapiro.

 ¿Dónde quedó Paco? El 19 de diciembre de 2007, Francisco Gil Díaz, director de Telefónica Movistar, escribió una fuerte y dura carta al entonces Secretario de Comunicaciones y Transportes, Luis Téllez, acusando de debilidad del gobierno para imponer el Estado de Derecho en el mercado de las telecomunicaciones frente a las estrategias de Telmex y Telcel para acelerar la convergencia tecnológica. Valdría preguntarle al ex secretario de hacienda si volvería a escribir esa carta, ahora a cargo de Dionisio Pérez Jácome, donde reclama que no se le de cambio del título de concesión a Telmex para transmitir video si no modifica precios y condiciones de interconexión. ¿O será que el Acuerdo Navideño 2010 con Telcel ablandó al “Secretario de Hierro”?

 Limpieza en el Barrio. Hace unas semanas la Segob, a cargo de Francisco Blake, continuó con la depuración de los permisos para la operación de casinos y centros de juego. Esta vez la purga le tocó a Royale&Sport Books, de Raúl Rocha Cantú y Javier Vázquez, quienes con permisos chafas abrieron locales en Querétaro. La Federación también abatió permisos piratas que ostentaba Miguel Del Río Liquidano, en Big Bola; y a Cesta Punta Deportes, de Moisés y Jacobo Shemaria.

 La Batalla Sidaoui. Se concretó el pasado martes el nombramiento de Manuel Ramos Francia, como nuevo subgobernador de Banco de México, tecnócrata de cepa pura que sustituye a Guillermo Güemez. El cargo los buscaba la Iniciativa Privada para alguno de sus representantes pero falló. Ahora viene la sustitución de José Julian Sidaoui, cuya selección será en medio del proceso de sucesión de Felipe Calderón.

 ¿Para dónde va Gruma? Luego de resolver a fondo las minusvalías en la adquisición de Derivados, Gruma, de Roberto González Barrera, se lanzó nuevamente al mercado de adquisiciones, sólo que en esta ocasión de manera altamente estratégica. La compra, esta semana, de Alburquerque Tortilla Company, le significó a la firma dirigida por Raúl Peláez, invertir 8.8 millones de dólares, cantidad que no suena estratosférica pero que le permite ubicarse de manera clave en el mercado de aquella zona de los Estados Unidos. Algo similar veremos con seguridad en China, Inglaterra y Sudamérica.

 ¿Quién pompó? Debería usted de ver lo lindo de chulo, que han quedado las posiciones de Aviacsa, ahora de Ramón Madero, en el AICM y en el Aeropuerto Internacional de Monterrey. Nadie duda que la aerolínea despegará la semana entrante. La pregunta es sí los “inversionistas encobijados” podrán soportar un negocio altamente competido mas allá de la coyuntura electoral del 2012.

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