Un Beltrones para el PRD

Un Beltrones para el PRD
Por:
  • larazon

Carlos Urdiales

A Carlos Navarrete lo consumió el poder. Acotado pero con opciones de decisión, elección u omisión dentro de su partido, Navarrete Ruiz, agotó su capital y ahora deberá dejar el espacio a otra propuesta aún con los mismos grupos de poder y control. Pagaron las facturas por aliancistas, por dejar de ser oposición.

En el partidazo de enfrente, Manlio Fabio Beltrones encarna el talento de la supervivencia, por su capacidad de construir las circunstancias que determinan a los personajes de cada capítulo, con pausas, con batallas que se pierden en aras de avanzar en la guerra. Se acaba la distancia, la simulación, son y parecerán el partido en el poder.

A pesar del asesinato de Colosio, de la leyenda urbana sobre sus minutos con Mario Aburto, del supuesto veto judicial estadounidense, de sus ausencias de reflectores o de sus alcances e intereses familiares en otras praderas políticas, el todavía coordinador priista en San Lázaro, podría ser el personaje de televisión Frank Underwood, en la aclamada serie de Netflix, House of Cards. Construye su futuro y aparece cada vez más cerca en la fotografía del poder.

Al PRD más que un intelectual, más que un académico, le urge un equivalente a Beltrones. Un operador equilibrista, un personaje con capacidad de lidiar con tantas tribus y cuotas. Contrario a lo que algunos presuponen, un externo no estaría exento de esas cadenas internas, si no que le pregunten a Miguel Ángel Mancera, que tardó 3 años en comenzar a liberarse de personajes que día y noche le cobraban imaginarias deudas de poder.

Rumbo a las elecciones de 2016, con 12 gubernaturas en juego, la definición de candidatos para 2018 a la Presidencia, con Morena plantado en el DF y Andrés Manuel López Obrador caminando firme rumbo a su tercera candidatura, con el PVEM más mañoso que nunca, disputando la cuarta posición electoral a nivel nacional y un INE permisivo a grado de misterio; el PRD debe atinar con su próxima dirigencia, no tiene margen para experimentos académicos ni poéticos, lo suyo no son las libertades que pregonan afuera y sino la operación y control de las que adolecen históricamente. Deben ser oposición para optar por el poder.

Hombres y mujeres suenan y sueñan en que les toque acceder a ese poder acotado, pero poder a fin de cuentas. Quien quiera que sea, deberá mostrar que puede y no sólo que quiere. El PRD necesita un equivalente a Manlio Fabio Beltrones. Búsquenle.

La aritmética electoral ilustra, la suma de preferencias entre las fuerzas de izquierda en sus más amplias acepciones, las ubica con posibilidades reales contra PRI y PAN, pero su división las condena a ser de segunda. Si el PRD vuelve a fallar, serán

otros los que construyan un futuro más moreno y menos amarillo.

urdiales@prodigy.net.mx

Twitter: @CarlosUrdiales