Y pues Gloria Guevara la consiguió

Pues al final, la que buscó, lo encontró. Encontró un camino que supo labrarse en años y lo recorrió. Con tropiezos, sí, y quizá llegando a una oficina distinta a la que buscaba ocupar, pero llegó.

Y pues cacarear el huevo, no parece mal.

Es, aseguran quienes han trabajado con ella, una mujer persistente, rayana incluso en la obstinación. Educada en la iniciativa privada, en empresas donde el cumplimiento de metas es el soporte del empleo, su llegada entonces a la función pública no resultó sencilla. Adecuarse a las formas de una secretaría de estado, no era fácil. Ser la secretaria de Turismo del gabinete federal, encabezado por el entonces presidente Felipe Calderón, no era lo mismo que dirigir la globalizadora Sabre en Latinoamérica. Quizá por ello actuó distinto a su antecesor, Rodolfo Elizondo, quien había ocupado esa silla por seis años, tiempo en el que insertó, como nunca antes, a la Sectur en la agenda política. Quizá por ello, porque se ufanaba entonces de no ser política, es que incluso no despachaba en su oficina en el vetusto edificio de la Secretaría en la calle de Mazaryk, sino que ocupaba la del director general del Consejo de Promoción Turística. Ahí, en ese moderno edificio, se hablaba más de mercadotecnia que de política.

Ahí se sentía, pues, más cómoda.

De su paso por la Sectur habrá que considerar que le tocaron los peores años para la industria: la recesión económica estadounidense, los efectos de la epidemia de influenza y el tener como jefe a un presidente que se ufanaba de ser el Commander in Chief en la guerra contra las drogas. Los ingredientes de una tormenta perfecta que golpeó duramente a la industria y que llevó incluso a que México cayera al lugar 15 en el ranking de la OMT de recepción de viajeros internacionales. Es cierto que pese a que no era muy afín a ejercer la política en su cargo, sí consiguió que se le diera la suficiente fuerza a Sectur, y al Turismo, en el gobierno federal. Consiguió que se construyera un primer acuerdo político nacional para apoyar al sector y sentó las bases para una meta que entonces ella se trazó, y muy pocos le creyeron: llevar a México al top 5 en el ranking de la OMT. Hoy está en el octavo lugar. De igual manera, sentó las bases en el CPTM para que en los siguientes años las estrategias promocionales que de ahí salieron consiguieran resultados hoy fundamentales.

Tenaz, buscó a su salida de Sectur el liderazgo de la Organización Mundial de Turismo, sin éxito. No logró concitar los apoyos suficientes para ello. Pero sí logró una posición destacadísima.

Le había contado en esta columna que Gloria Guevara, la ex secretaria de Turismo, sería la sucesora de David Scoswill en la presidencia del Consejo Mundial de Viajes y Turismo –WTTC por sus siglas en inglés-. Y así se concretó.

En un comunicado, el Chairman de la junta del WTTC, Gerald Lawless, dijo: “Gloria posee un liderazgo comprobado y es conocida y respetada dentro del sector global de Viajes y Turismo. Me complace que sea ella quien guíe al WTTC hacia su nueva etapa de desarrollo”.

Gloria Guevara por su parte declaró que éste es un momento esencial para el sector de Viajes y Turismo y para los 292 millones de personas cuyos puestos de trabajo dependen de él. Las predicciones a futuro son buenas, pero los desafíos actuales en materia ambiental o el terrorismo, hacen que ahora, más que nunca, el sector deba unirse en una sola voz.

El cargo que obtuvo la ex secretaria no es menor. El WTTC está integrado por más de 150 capitanes de las empresas líderes en el mundo del sector de Viajes y Turismo. Es la única organización del sector privado a nivel global que representa a todos los negocios e industrias de viajes y placer en el mundo.

Y al final, pues, Gloria lo consiguió.

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