Artista desafía a pequeños lectores en libros ilustrados

Artista desafía a pequeños lectores en libros ilustrados
Por:
  • carlos_olivares_baro

Dos cuadernos dirigidos a los lectores infantiles, de la editorial Flamboyant y distribuidos por Colofón-México, circulan con mucha demanda en las librerías del país: Esto no es una selva y El gran libro de los superpoderes, ambos con textos de la psicóloga-escritora Susanna Isern e ilustraciones de la artista plástica española Rocio Bonilla.

Álbumes que conciertan lo verbal con iconografías de asombrosas alegorías y matices empalmados. Uno narra la historia de Paula, quien decidió un buen día decir que no y su casa se convirtió en una frondosa selva (Esto no es una selva); y el otro, habla de ese superpoder que nos convierte en personas únicas e irrepetibles, y nos pregunta: ¿cuál es el nuestro? (El gran libro de los superpoderes).

“Los niños no son tontos, son capaces de discernir el mundo frente a una imagen que rete su imaginación. Cuando ilustro un relato infantil, me propongo desafiar a los lectores: provocación que los sumerge en un espejismo en que la fantasía juega un papel sustancial”, dijo a La Razón Rocio Bonilla.

¿Ilustraciones que conforman un discurso paralelo al texto?  Huyo de que la imagen sea un complemento de lo verbal: me interesa sugerir a partir de la estructuración del discurso visual. El niño tendrá que jugar con las dos expresiones, conjuntarlas y crear un universo en la confluencia de lo representativo y lo enunciado.

¿Montaje que le debe mucho al cine, al cómic...? Me atrevo a decir que mis dibujos son muy cinemáticos: soy obsesiva con el ritmo visual. Empalmo gestos, miradas y actitudes en espacios donde los personajes se sienten libres, de ahí la movilidad que los niños tanto disfrutan.

¿Uso del collage? El collage proporciona a los niños la capacidad para asociar elementos diversos. Ahí entra en juego la fantasía de los lectores.

¿Fragmentaciones iconográficas? Más que todo, en un determinado espacio integro diferentes historias visuales que los niños van haciéndolas convergentes. Fragmentaciones que se convierten en un todo por agrupación conceptual.

¿Colores gratos interceptados por una luz de vital expresión? El color no tiene que agredir: al contrario, debe arropar. La luz es clave en mi trabajo, si no hay fulgor no hay indicio: todo se pierde en la sombra. Procuro que la irradiación esté presente en mis iconografías.

¿Qué es para usted ilustrar? Crear un universo paralelo con el universo real. Cosmos donde el color dialoga con la realidad y evita no imitarla, sino recrearla. Los grandes pintores hacen eso: pienso en Gustave Doré, su obra confirma lo que he dicho.