Marín transforma 2.8 toneladas de armas en las Alas de la Paz

El escultor Jorge Marín, uno de los exponentes más representativos del arte figurativo en México, se sumó a la lucha que emprende el Gobierno de la Ciudad de México contra la violencia y ayer develó en el Museo de la Memoria y la Tolerancia la escultura Alas de la Paz.

“Nunca olvidaremos lo que un arma de fuego representa, pero tampoco olvidemos que las cosas pueden cambiar, si ésa es la voluntad de todos”, dijo durante su intervención en el evento, en el que estuvieron presentes el Jefe de Gobierno, Miguel Mancera, el secretario de Desarrollo Social de la CDMX, José Ramón Amieva y Cuauhtémoc Cárdenas entre otras personalidades.

El escultor, de origen michoacano, utilizó dos punto ocho toneladas del arsenal recuperado en el marco del programa Por tu familia, Desarme Voluntario.

La obra está compuesta por dos grandes alas que asemejan la majestuosidad del vuelo del Ave Fénix y nos recuerdan que como sociedad podemos renacer de las cenizas del pasado para forjar un mejor futuro, explicó el autor de la pieza.

El proyecto de Jorge Marín nació en 2016 y fue la Secretaría de la Defensa Nacional, con mediación del gobierno capitalino, la que le facilitó las armas que la gente canjea por tabletas electrónicas, laptops y electrodomésticos.

Antes de que las armas fueran entregadas a Jorge Marín el gobierno capitalino se cersioró de que éstas no hubiesen sido utilizadas en algún delito luego de lo cual fueron desactivadas y “técnicamente quedaron como una chatarra”, que ahora tiene otro significado.

Una vez que las armas dejaron de ser funcionales fueron unidas a través de soldadura y se mantuvo su color original. “No fueron pintadas, el material está expuesto como es porque no quise alterar su realismo, el efecto que tienen, porque un arma es un arma y siempre hay que estremecernos cuando estemos cerca de una”, dijo al culminar su proyecto en septiembre de 2016.

Sobre la importancia de fomentar la paz en el mundo, el escultor recordó en esa misma presentación que “una sociedad que vive en paz es plena y sus habitantes pueden aspirar a una mejor calidad de vida, y una en la que hay conflicto tiende a sufrir y a desaparecer” y consideró que no hay un país o rincón del mundo que se pueda decir libre de violencia, por lo que todos debemos promover la paz.

El artista ya ha creado otras esculturas de alas, que se han convertido en una referencia icónica de su trabajo.

Con esta contribución, Marín espera que las Alas por la Paz se conviertan en un “símbolo de la sociedad pacífica que queremos todos”.

De diciembre de 2012, cuando se puso en marcha la entonces acción institucional de Desarme Voluntario, a la fecha, se han destruido 30 mil 497 armas de fuego, 21 mil 949 largas y ocho mil 548 cortas.

También se ha recuperado dos mil 432 granadas; 199 mil 671 cartuchos útiles y 12 mil 611 cargadores, cañones y proyectiles. Asimismo, se han recibido 21 mil 74 juguetes bélicos que fueron intercambiado por 14 mil 850 de tipo didáctico.

Mancera Espinosa señaló que este es uno de los programas más exitosos de la ciudad que han sido operados de manera eficiente y han contado con el respaldo de la ciudadanía y de diversas instituciones locales y federales, como la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la iglesia Católica, gracias a lo cual la gente acude.