Polémica por venta de obra de Rodin

Polémica por venta de obra de Rodin
Por:
  • larazon

Karla Fajardo/La Razón

Gran polémica causó en Inglaterra la posible venta de diversas obras de arte, entre ellas uno de los célebres desnudos escultóricos del artista francés Auguste Rodin. Esto, con el objetivo de financiar la construcción de un nuevo museo dedicado al barco protagonista de una de las mayores tragedias registradas en alta mar: El Titanic.

La iniciativa, impulsada por el ayuntamiento de Southhampton, ubicado al sur de Inglaterra, ha desatado la cólera de distintos representantes de medios artísticos por considerarlo un peligroso precedente para que autoridades puedan desprenderse, sin mayor problema, de las diversas obras de arte integradas a las colecciones públicas.

Rodin, famoso por sus esculturas cargadas de una extrema perfección de las formas del cuerpo, es considerado uno de los artistas galos más importantes de su época, hecho que convirtió a sus obras en una gran baluarte para quienes las poseen.

Sin embargo, para las autoridades londinenses desprenderse de tales obras para lograr la construcción del nuevo museo inspirado en el trasatlántico, que estaría financiado también con fondos de la Lotería Nacional, no resulta tan descabellado como para el ex director de la National Gallery of Art y actual ejecutivo de la Royal Academy of Arts de Londres, Charles Saumarez.

“Las directrices de la Asociación de Museos exigen que toda venta de una obra de arte beneficie directamente a la colección de la que se trate, y no parece que éste sea el caso”, afirmó Saumarez.

Agregó: “los fondos van a utilizarse para un museo marítimo. No creo que la Lotería Nacional debiera financiar una nueva atracción turística que exija la venta de obras importantes”.

Contrario a lo que dicen los críticos de esta medida, quienes aseguran que la venta de las obras podría ser el inicio de un negocio indiscriminado sobre el legado cultural de una nación, el concejal responsable de Southampton, lugar de donde partió el barco en 1912, John Hannides, subrayó que la construcción del museo del Titanic servirá para ampliar la superficie del museo, que debido a la falta de espacio, sólo puede exponer 250 de las tres mil 500 obras que posee.

fdm