Romero muestra en "Germinal" erotismo y sensualidad

Con un conjunto de obras de gran sensualidad, erotismo y candidez, la mexicana María José Romero presenta en el Instituto de México "Germinal", su más reciente serie, en la que elige por primera ocasión pequeños formatos y que podrá verse hasta el próximo 1 de septiembre.

Romero, formada en la Boston University y en The School of The Museum of Fine Arts, presenta una cincuentena de obras, sobre papel y sobre madera, fina y cuidadosamente trabajadas, las cuáles invitan al observador a un diálogo íntimo, exclusivo, propio, con las piezas; a interactuar y adentrarse; a acercarse para crear un diálogo privado.

Son obras de gran sensualidad, muy característico de los gestos y trazos en el lenguaje visual y plástico de la artista mexicana.

En este particular lenguaje se observa invariablemente una presencia de formas imbuidas por lo sensorial, por los fluidos que emanan los organismos vivos y por los sugerentes entrelazamientos de la naturaleza.

En entrevista con Notimex, la mexicana señaló que 25 de estas obras tienen una técnica mixta de acrílico, carbón, lápiz, cera, y hay otras 25 dibujos a lápiz.

"Es la primera vez que me pongo a trabajar con un formato muy pequeño, y básicamente porque estoy en un momento de mi vida en el que podría decir que volví a nacer", dijo.

"Vengo de una pérdida de una pareja de diez años, muy dolorosa, luego pasó un duelo, pasó una etapa y digamos que ahorita estoy en esa nueva etapa, atravesamos ese túnel, todo está naciendo otra vez, nueva pareja, nuevas ilusiones, nueva casa, un ciclo completamente nuevo de vida", añadió.

"Germinal nace de ese sentimiento y cuando uno está robando la vida después de un momento de duelo, de muerte, empiezas a concentrarte en lo que está pasando afuera en el mundo", acotó.

Citó las noticias tristes que hay en el mundo y en México, de la violencia que hay, de los robos, de la corrupción, todo lo que está pasando y que contamina en diversos momentos.

"Uno que está viviendo un momento de mucha vida, se pregunta cómo pueden convivir estas dos energías, tan fuertes, en un ser humano, al mismo tiempo, y yo creo que los seres humanos también necesitamos oír que la vida está detrás de todo esto, casi combativamente diciendo aquí estoy, naciendo y regenerándome", indicó.

Hizo hincapié en que la vida está ahí y basta voltear a ver la naturaleza, a los seres queridos para reinventarse.

Al explicar porqué decidió trabajar en formato pequeño, anotó que "lo que está naciendo, es lo que está a punto de salir, está en el umbral de lo que está dentro y de lo que está fuera. Es un momento muy íntimo de la naturaleza". Siendo una artista que trabaja generalmente en formato grande, "para mí fue un reto hacer formato pequeño".

Agregó que ella quería que la gente tuviera el contacto con esa energía en un cuadro pequeñito, en una pared muy grande donde no hubiera cuadros alrededor, y donde no quepa una cabeza más que la de cada quien, solo la mirada del espectador.

Romero inició sus estudios de arte en 1989. Desde entonces su interés por expresarse a través de diversas técnicas pictóricas la han conducido a realizar obras de diferentes formatos en un personal e introspectivo lenguaje en el campo de la abstracción.

Su trabajo se caracteriza por elaborar series temáticas cargadas de significados conceptuales: "Craxis" (2008), "Infarto" (2012), "¿Le gusta este jardín que es suyo?" (2013) y Roller Coaster Manhattan" (2014), entre otras.

Además de sus exposiciones individuales, ha participado en un sinnúmero de colectivas en México, así como en Londres, República Dominicana, Boston y Nueva York. La artista vive y trabaja en su país.