El fin de una era

El fin de una era
Por:
  • larazon

FotoArte Especial

La era más productiva en la historia del Barcelona pierde hoy a su artífice intelectual. Josep Guardiola dirigirá por última ocasión al equipo blaugrana para cerrar de esta manera un ciclo de cuatro años y lo hace con la oportunidad de conquistar su título 14 en la final de la Copa del Rey.

Todo inició el 13 de agosto de 2008, cuando el equipo culé venció 4-0 al Wisla Krakow en la ida de la fase previa los grupos de la Champions League. Cerca de 56 mil aficionados presenciaron el debut de Guardiola en el Camp Nou sin saber que era la primera de las 178 victorias de un equipo que es considerado el mejor en la historia del futbol.

Poco se esperaba de Pep en el banco. A su llegada pidió la salida de Ronaldinho y Deco, lo cual generó controversia y después cierto enojo tras perder su primer partido de liga en la cancha del Numancia. 176 triunfos después, el tropiezo fue olvidado y ahora el timonel se encuentra entre los personajes más idolatrados del club.

Ante este contexto, Guardiola pidió a sus jugadores en su última conferencia de prensa, la 546, el máximo esfuerzo y así conseguir el primer título del año, tras el éxito negado en la liga y Champions.

“Es el último esfuerzo del año. Que dejen todo”, pidió Guardiola, quien el 13 de mayo del 2009 levantó el primero de 13 títulos hasta el momento, luego de superar en la final de la Copa del Rey al Athletic por 4-1.

Poco más de tres años después, como si se tratara de una broma del destino, Guardiola cierra su ciclo como estratega culé en un escenario idéntico al de su primera conquista: la final de la Copa del Rey ante el Athletic de Bilbao, hoy en el estadio Vicente Calderón.

Ambos equipos llegan a la final con sendos golpes que han marcado su temporada. Mientras que al Barcelona le fue imposible ganar la liga y Champions, Bilbao tiene aún la cicatriz que le dejó la derrota ante el Atlético de Madrid en la final de la Europa League. El último título ganado por el Athletic fue la liga de 1998, por lo que la necesidad del título tiene un mayor peso para los rojiblancos.

“Somos conscientes que jugamos contra un rival que hace años que no gana un título. Tienen esa ventaja. Imagino a mis jugadores sin haber ganado un título después de cuatro o cinco años, ¿cómo estaríamos? En esto, ellos parten con ventaja. Deberemos ganarles en otras facetas”, declaró Pep, quien hoy buscará cerrar su era con la estampa que lo caracterizó: cargando un trofeo.

El escenario está listo para un final feliz y una despedida llena de sonrisas y alegría, sin embargo, el equipo de Marcelo Bielsa intentará interrumpir el festejo y amargar el adiós del mejor entrenador del mundo, que después del silbatazo final buscará nuevos horizontes, que le permitan confirmar esa condición otorgada por la FIFA a principios de año.