El Real celebró con luto por afición en Irak

El undécimo título europeo del Real Madrid fue coronado por una jornada llena de festejos ayer en la capital española.

Tras aterrizar a las 6:40 horas locales en el aeropuerto de Barajas y dirigirse al Estadio Santiago Bernabéu, fueron en un camión descapotable a la Fuente de Cibeles, donde aficionados los esperaron desde la medianoche.

Ahí, el capitán Sergio Ramos le ofreció la copa a la efigie de la diosa griega.

No habían pasado las 8:00 de la mañana cuando el plantel volvió a su estadio.

A las 20:30 horas visitaron las sedes del Ayuntamiento y de la Comunidad de Madrid, para culminar de nueva cuenta en el Estadio Santiago Bernabéu.

Tragedia en Irak. Una docena de aficionados al Real Madrid murió en un ataque a la peña del club blanco en Baakouba, a 60 kilómetros al norte de Bagdad, justo antes de comenzar la tanda de penales de la Final ante el Atlético.

Los asaltantes abrieron fuego contra los aficionados y el primer balance habla de 12 muertos y ocho heridos, según informó el diario As de España.

El presidente del equipo blanco, Florentino Pérez, dedicó la victoria del sábado a las víctimas del atentado en Baakouba, además de las del pasado 13 de mayo en Balad, donde fallecieron otras 16 personas en un ataque similar.