“Falla eléctrica, ayúdenos, ¡vamos para abajo!”… después, la tragedia

“Falla eléctrica, ayúdenos, ¡vamos para abajo!”… después, la tragedia
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  • la_razon_online

“¡Avión está en falla eléctrica total, sin combustible, ayúdenos, vamos para abajo…!

Torre: “Pista libre y operable, lluvia sobre el suelo, bomberos alertados.”

Piloto: ¡Vectores señorita, vectores a la pista!

Torre: La señal radar se perdió, no lo tengo, notifique rumbo ahora.

Piloto: ¡Vamos con rumbo 3-6-0!

Torre: Con rumbo (...) Vire por la izquierda cero uno cero, proceder al localizador del borde Rionegro, una milla adelante. Al momento usted se encuentra (...) correcto a la izquierda con rumbo tres cinco cero.

Piloto: Izquierda 3-5-0.

Torre: Usted está a 0.1 milla del borde Rionegro. No lo tengo con la altitud.

Piloto: ¡Nueve mil pies señorita, vectores, necesitamos vectores!

Torre: Usted está a 8.2 millas de la pista. ¿Qué altitud tiene ahora?...

En ese momento se perdió todo contacto entre los controladores aéreos y el vuelo de LaMia, que segundos después se estrelló contra el cerro El Gordo, a menos de 5 minutos de la pista, y en donde murieron 71 pasajeros, prácticamente la totalidad del club brasileño Chapecoense, y otros seis salvaron sus vidas.

La última conversación entre el capitán Miguel Quiroga con la torre de control del aeropuerto José María Córdoba fue difundida por el portal del diario El Colombiano de Medellín y demuestra que el avión se quedó sin combustible previo a su llegada.

El audio recabado del vuelo 2933 inicia 10 minutos antes de la tragedia cuando Quiroga entra en contacto con la torre: “en acercamiento solicitamos prioridad para la aproximación, se nos ha presentado un problema de combustible” y 13 segundos después le respondieron: “Entiendo que solicita prioridad para su aterrizaje igualmente por problema de combustible ¿correcto?”, a lo que el piloto respondió afirmativamente.

La continuación de la conversación gira en torno a cómo la situación se agrava, cuando el piloto solicita varias veces vectores para aproximarse a la pista mientras pierde altura y cómo la torre le avisa que, primero, debe desviar a otros dos artefactos que estaban por debajo del de LaMia, para que éste aterrizara.

El audio coincide con el testimonio de un copiloto de Avianca, Juan Sebastián Upegui, que escuchó en su avión la conversación, pues la nave volaba cerca del avión de LaMia.

Upegui narró a otros medios colombianios cómo vio pasar el avión, aún con luces, hacia abajo, mientras ellos dejaban libre el espacio para que la nave aterrizara.

Al mismo tiempo que se difundió esta información, en varios diarios salió otra sobre un mensaje publicado en Facebook por el paraguayo Gustavo Encina, miembro de la tripulación, que se ha interpretado como un presagio o despedida

“¡Buen día! ¿Hacia dónde miras en tu vida? ¿Atrás o adelante? Que el Señor te dé la gracia de soltar las cosas, aun aquellas que consideras preciosas en esta vida, y te permita mirar hacia adelante, donde está Cristo esperándote, para un encuentro glorioso…”

CULPAN AL PILOTO. En su primera declaración oficial, Gustavo Vargas, director de LaMia, puso como responsable del accidente a Miguel Quiroga. “Él tenía la opción de cargar combustible en Bogotá”, declaró al canal boliviano Unitel.

“Quiroga tenía toda la potestad de entrar a reabastecer, pero él decide no entrar porque pensó que le alcanzaba el combustible…Tenemos que investigar por qué se fue directo a Medellín”, remarcó Vargas.

“Temí lo peor”, dijo mamá de fallecido

En entrevista con la cadena RJ Inter TV, la madre de Tiago, delantero del Chapeconese, reveló que tuvo malas sensaciones acerca del vuelo que tomaría su hijo horas más tarde con su club.

Bárbara Rocha reveló: “Me sentí sin fuerzas todo el día y con un dolor en el pecho. Algo sentía que estaría mal…Le dije a Sergio (padrastro de Tiago): ‘no tenemos noticias de Tiago’, y me dijo: ‘no entremos en pánico, tranquilízate. Vamos a dormir’.

“A las seis de la mañana, los vecinos tocaron en mi puerta y me preguntaron si ya sabía; ‘¿saber qué’. Entraron a mi casa, me abrazaron y me comentaron que el avión donde viajaba Tiago se había estrellado…”, reveló.

La señora Rocha también dijo que fue la última en enterarse de la muerte de su hijo, pues ni el agente de Tiago ni otras personas que hablaron con ella se lo dijeron y que la pérdida es más dura pues toda la familia celebró días antes que él iba a ser papá.

Primero el velorio y luego la demanda: presidente

Directivos del club brasileño aseguran que en 24 horas más de 10 mil personas solicitaron ser socios del equipo

Redacción La Razón

El vicepresidente jurídico del club Chapecoense, Luiz Antonio Pallaoro, manifestó que la institución estudiará tomar medidas judiciales contra la aerolínea LaMia cuando concluya la repatriación de los fallecidos de la plantilla y el posterior velorio.

“Hoy estamos centrados en la cuestión humanitaria, de las familias y de las víctimas. En un segundo momento nos vemos a tener que parar para pensar en la reestructuración del equipo y también en las medidas judiciales”, dijo el directivo en una rueda de prensa realizada en el estadio.

La directiva del club brasileño también anunció que en las últimas 24 horas más de 13 mil personas solicitaron convertirse en socios del club. “Nadie se pudo imaginar jamás la dimensión que tenemos. Entre ayer (el martes) y hoy 13 mil personas se quisieron asociar; todos de fuera de Chapecó”, dijo por su parte el presidente interino, Ivan Tozzo.

Tozzo, quien se ha visto obligado a asumir temporalmente el cargo tras el fallecimiento en el accidente del presidente Sandro Pallaoro, apuntó que hasta la fecha el equipo contaba sólo con 9 mil asociados de pago. En las últimas horas el club del estado de Santa Catarina ha recibido numerosas muestras de apoyo procedentes tanto de Brasil como del extranjero.

Por otro lado, la marca deportiva Umbro, encargada de vestir al equipo, comunicó que la emblemática camiseta verde del Chapecoense está agotada porque se multiplicó la demanda por parte de aficionados de todo el mundo que quieren adquirirla.

Los internautas han criticado en las últimas horas en las redes sociales a algunos portales de ropa deportiva que han intentado sacar ventaja de la tragedia y han subido las camisetas de 159 a 249 reales (50 a 78 dólares aproximadamente) tras el fatal percance.

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