Leicester City pone suspenso al título de la Liga Premier

Finalmente no fue en el Teatro de los Sueños, pero el final feliz de la historia de la cenicienta del futbol europeo parece ser sólo cuestión de tiempo.

Leicester City empató 1-1 ante el Manchester United en Old Trafford, por lo que llegó a 77 puntos, ocho más que el Tottenham, que visita hoy al Chelsea en el cierre de la Jornada 36 del campeonato.

Una derrota o empate de los Spurs será suficiente para que los Zorros aseguren matemáticamente su primer título de la Liga Premier en 132 años de historia, una temporada después de amarrar su permanencia en la Máxima Categoría en un sorprendente cierre de cinco victorias y un empate en siete partidos, luego de pasar prácticamente la mitad del torneo en el último lugar general.

Apenas al minuto ocho, el ecuatoriano Antonio Valencia entró al área por el callejón derecho, mandó un centro, el balón se paseó por el área y finalmente lo encontró el francés Anthony Martial, quien pegó de derecha para vencer al arquero danés Kasper Schmeichel.

Pero sólo pasaron nueve minutos más para la respuesta de los Zorros. En jugada de táctica fija, el capitán Wes Morgan remató de cabeza el centro de Danny Drinkwater y marcó el tanto del empate, que resultó definitivo.

El partido se tornó de ida y vuelta, con la iniciativa puesta por el United, mientras el Leicester buscó aprovechar los espacios con contragolpes.

El arquero Schmeichel fue puesto a prueba más de una vez y los Zorros terminaron el juego con 10 hombres, ya que Drinkwater fue expulsado al 85’, lo que representó su primera tarjeta roja en 253 partidos oficiales con el equipo, al que ha acompañado desde la época en la Football One Championship.

La espera del Leicester City puede ser de 30 horas solamente si el Tottenham no gana en Stamford Bridge ante el todavía campeón de la Premier, el Chelsea.

Paradójicamente, el técnico de los Zorros, Claudio Ranieri, no podrá enterarse al momento del resultado en el centro de Londres, ya que estará en un avión de regreso a Inglaterra, pues ayer viajó a Italia para visitar a su madre, de 96 años, según reporta la agencia AP.

Y si bien esta historia le da la vuelta al mundo, en Tailandia hay particular interés. En la sede de la compañía King Power, de Vichai Srivaddhanaprabha, quien también es el dueño del equipo, 800 trabajadores se reunieron para ver el partido y apoyar al club como si se encontraran en Manchester.

Si hoy derrota el Tottenham al Chelsea, la espera puede terminar el sábado próximo con una victoria ante el Everton en el King Power Stadium. Los Toffees están en el lugar 11 de la clasificación y ya no pelean nada, pero pueden ser comparsa del final más feliz e inesperado en la era de la Liga Premier.