Phil Spector

La canción #6

Phil Spector
Phil SpectorFuente: freep.com
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Murió un arquitecto del sonido. Artista, personaje incomparable, productor y loco que creó una intersección entre el rock, el pop y la música sinfónica. Era uno de los genios de la producción y rey Midas de la industria en los sesenta. Pero su locura terminó por devorarlo. La personalidad paranoica y sociópata que lo poseía, mezclada con armas, alcohol y drogas, era un coctel explosivo que lo llevó a la cárcel por el asesinato de la actriz Lana Clarkson. Falleció en el hospital de Stockton a los 81 años por Covid-19, sin música para despedirse.

Existe una anécdota sobre su carácter obsesivo por cada disco que hizo, más de doscientas producciones entre sencillos y álbumes, la mayoría destinados a ser éxitos contantes y sonantes. Spector se forjó como compositor, guitarrista y cantante del trío Teddy Bears; tuvo con ellos un par de éxitos al finalizar los cincuenta. Después fue compositor y músico de sesión en los estudios Gold Star, donde aprendió el arte y la ciencia de la producción con Stan Ross. Su década de oro empezó en 1960, cuando se dedicó a producir en su disquera Philles Records, una fábrica de hits. En ese periodo formó su orquesta, The Wrecking Crew, y a los grupos vocales que moldeaba en el estudio para exprimirles los #1 en las listas de popularidad: las Crystals, las Ronettes, los Righteous Brothers y Ike con Tina Turner. Así desarrolló las técnicas de grabación y producción que le dieron celebridad y fortuna: el monumental Muro de sonido, orquestado por una cascada de coros e instrumentos eléctricos y acústicos, metales, cuerdas, pianos, percusiones y efectos, duplicados y triplicados. Su estilo estableció un canon para productores como Jeff Lyne de ELO y Jim Steinman de Meat Loaf y Bonnie Tyler.

La personalidad sociópata, mezclada con armas y drogas, era un coctel explosivo

En 1969 produjo Let It Be, un discazo con todo y arreglos florales, el último de los Beatles con el número uno: “The Long and Winding Road”. MaCa lo odió, pero Lennon y Harrison le pidieron sus siguientes producciones: Plastic Ono Band, Imagine, parte de Rock ‘n’ Roll, All Things Must Pass y The Concert for Bangladesh. Puro clásico, pese al balazo que se le salió con Lennon. También se hizo odiar por cubrir de merengue Death of a Ladies’ Man de Leonard Cohen. Una de las anécdotas más descabelladas sucedió con los Ramones, les produjo la sinfonía punk End of the Century a punta de pistola, luego de que lo amenazaran con una navaja. Solía andar armado, con guardaespaldas, hasta que en 2009 lo sentenciaron por el balazo a Clarkson. Fue uno de los productores con números uno en las listas durante tres décadas. Tenía un lado A muy luminoso y un lado B demasiado oscuro.