Diseños de Carolina Herrera no son plagio, sino inspirados en México: Armando Takeda

Luego de que la icónica casa de moda Carolina Herrera fuera acusada de plagiar los bordados originarios de los artesanos del Istmo de Tehuantepec y Saltillo, el reconocido diseñador mexicano Armando Takeda afirma que para él no se trata de una copia, sino de una interpretación de las creaciones artesanales.

“Yo creo que son unos trabajos que están inspirados en México y que los están presentado en otra técnica. Sí son tejidos en algunos casos, pero son tejidos más industriales y no son de telar de cintura”, afirma el modisto en entrevista para La Razón.

Takeda, quien trabajó como diseñador asistente en Alexander McQueen, destaca que estas colecciones, como la de Resort 2020 de la firma con sede en Nueva York, forman parte de la apertura cultural.

“Yo creo que se debe estar abierto. Todo el mundo se está inspirando en India y nadie se molesta, pero le tienes que dar una interpretación nueva como diseñador y darlo a conocer a la gente que nunca ha visitado México”, expresó el joven modisto que ha realizado colaboraciones con artesanos mexicanos para difundir la tradición textil de México en el mundo.

Sin embargo, este no es el único caso en el que la cultura mexicana ha sido retomada por firmas internacionales de lujo. Armando Takeda recodó el caso de Dior, cuando la casa de moda francesa presentó un bolso con motivos chiapanecos.

“En el caso de Dior dijeron que eran hechos en Chiapas, pero no fueron hechos ahí, sino en otro lado, eso sí me molestó, porque están trabajando artesanos que no son mexicanos”, explica el diseñador.

Asimismo, Michael Kors también fue señalado de plagio tras presentar su colección Primavera-Verano 2019 en la que incluía una sudadera similar a las de jerga que se pueden encontrar en México. Aunque el diseñador estadounidense utilizó un lujoso algodón y casimir.

Zara, del grupo Inditex, también estuvo bajo la lupa cuando en 2018  presentó sus propuestas con un bordado similar al de la comunidad de Aguacatenango, Chiapas.

Mientras que en 2015, Isabel Marat causó polémica al presentar en una de sus colecciones los bordados oaxaqueños de Santa María Tlahuitoltepec.

Por otra parte, en 2008 la lujosa firma Hermes usó los bordados de Tenango de Doria, Hidalgo, para plasmarlos en mascadas de seda.

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