La tecnología cambió al cine: Michael Douglas

La tecnología cambió al cine: Michael Douglas
Por:
  • Rosa

Michael Douglas difícilmente podría haberse dedicado a otra cosa que no fuese el séptimo arte. Estudió interpretación en la Universidad de Santa Bárbara y comenzó a hacer pequeños papeles en televisión, cine y teatro, hasta que se dio a conocer por la famosa serie Las calles de San Francisco junto a Karl Malden. En los 80 y 90 nada se hacía en Hollywood sin contar con su nombre en los rótulos. Protagonizó filmes ya clásicos como Wall Street (1987), Atracción fatal (1987), Instinto básico (1992) y Un día de furia (1993), entre otros. Pero, aparte de su carrera como actor, Douglas ha producido más de 19 filmes.

Cuestionado y comparado siempre con su progenitor, el tiempo ha engrandecido su figura, que a menudo ha estado salpicada por la polémica. Precisamente en la época en que rodaba Atracción fatal tenía como empleada a Susan Braudy, que al calor del caso Weinstein, le acusó de acoso, algo que Douglas ha negado rotundamente. Hace años se confesó adicto al sexo y hasta aseguró que el cáncer que ha padecido se debió a la práctica del sexo oral.

Con todo, a diferencia de otros casos sonados, las acusaciones de Braudy no parecen haber tenido predicamento en Hollywood y no han interferido en la participación y promoción de su nuevo filme, Ant-Man y la Avispa la secuela del extraño superhéroe que coprotagonizan Paul Rudd (Ant-Man) y Evangeline Lilly (la Avispa).

"El hablar con una hormiga que no está realmente delante de ti es una experiencia curiosa. La película es muy imaginativa y me gusta que Marvel haya incluido más sentido del humor en esta segunda parte”

Michael Douglas

Actor

Con Ant-Man entró en el mundo de los superhéroes.  He disfrutado mucho. El hablar con una hormiga que no está realmente delante de ti es una experiencia curiosa. La película es muy imaginativa y me gusta que Marvel haya incluido más sentido del humor en esta segunda parte. Creo que el filme tiene un equilibrio entre acción y humor bastante bueno. Además, pienso que se han elegido muy bien a los actores, se ha valorado mucho ese aspecto, lo cual es de agradecer. No todo son efectos especiales, que es lo que ocurre en muchas películas hoy en día, donde no se valora tanto la calidad de los intérpretes.

Imagino que es más sencillo trabajar por segunda vez con el mismo equipo. Obviamente todo va mucho mejor porque ya existe una relación laboral y de amistad entre nosotros. Hay una familiaridad que facilita las cosas y hace que todo vaya más fluido.

¿Cómo ha cambiado su personaje respecto a la primera parte? Se ha hecho más mayor (risas). Lo cierto es que no creo que haya cambiado demasiado. Aún no está convencido de que Scott Lang sea la mejor opción para convertirse en la pareja de su hija, piensa que puede conseguir algo mejor.

¿Le resulta más fácil interpretar un papel que tiene similitudes con usted o se siente más cómodo con personajes totalmente diferentes? Es más fácil cuando te pones una careta, sin duda alguna. Además, hacer un papel secundario también resulta más ligero porque no tienes todo el peso del filme sobre ti.

Michelle Pfeiffer hace de su mujer en el filme. ¿Cómo ha sido trabajar con ella? El hecho de poder actuar junto a alguien que ha sido un icono como yo en los años ochenta es un verdadero placer, nunca habíamos coincidido antes.

¿Si pudiera elegir un súper poder cuál sería? Sin duda alguna, poder volar. Sería maravilloso. Despegar y largarme a mi libre albedrío.

¿Cuál diría que ha sido el mayor cambio desde que empezó en la industria? Sin lugar a dudas. La tecnología, el cambio a rodar digitalmente y, como consecuencia, la forma de entrega de los filmes. Pasamos de la sala al vídeo, al dvd, y ahora al streaming. Aparte de eso, la esencia es la misma: la luz, las lentes...

Michael Douglas

Hijo de la primera actriz Diana Dill y el actor Kirk Douglas, el protagonista de Instinto básico, estudió interpretación en la Universidad de Santa Bárbara. Su primer Oscar lo obtuvo con Wall Street en 1988. Su profesionalismo y atractivo físico lo convirtieron en uno de los actores más deseados de Hollywood.