En México hay cerca de 45 mil menores infectados

Niñez COVID, el sector olvidado “en una crisis de adultos”

Ya sea porque la enfermedad no les pega o porque el encierro limita sus garantías, los más pequeños no son prioridad ni en la familia ni en el Gobierno

Activistas y ONG alertan daño a los derechos de niñas, niños y adolescentes
Activistas y ONG alertan daño a los derechos de niñas, niños y adolescentesCuartoscuro
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A Rosaura López no sólo le preocupa contagiarse de COVID-19; piensa que cada día que corre bajo esta contingencia sanitaria es un tiempo menos para la calidad de vida de sus dos niños de —11 y 13 años de edad—, quienes, dice, “se están perdiendo una época importante por el encierro”.

Esta mujer, vecina de Naucalpan, Estado de México, no sabe cómo puede ayudar a que este golpe no los afecte tanto, pues además de estar al pendiente de ellos —de que no falten a sus clases en línea— debe trabajar de manera remota y mantener la casa en orden.

"Me preocupa que esto les afecte en su crecimiento, no estar con sus compañeros, no salir a jugar, pasar tantas horas en la computadora, ahora por las clases; me preocupa el impacto", comentó en entrevista.

Sin embargo, el encierro en sí podría ser el menor de los males para la niñez mexicana en medio de una pandemia que nadie esperó que, si quiera, alcanzara el año. Desde que el COVID firmó su primer registro en nuestro país, los ecos de la crisis sanitaria incidieron en los más pequeños, quienes a pesar de estar en casa recibieron menos atención de sus padres, absortos en el home office, las tareas del hogar o el desempleo.

Incluso desde el punto de vista de las políticas públicas, los gobiernos optaron por enfocar sus esfuerzos en la población adulta, una suerte que pone en peligro los derechos de la niñez.

Juan Martín Pérez García, director de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), recordó en entrevista que toda la información del COVID que proveen las autoridades de salud, tanto federales como estatales, recae en el cuidado de adultos mayores o en edad madura, sin considerar a niños, niñas o adolescentes.

Como se considera que no es letal (el COVID-19 para niños y niñas), no han sido atendidos. Ni siquiera hay información para ellos, por supuesto tampoco una vacuna

Juan Martín Pérez / Redim

"La situación del COVID eclipsó el tema de infancia porque se consideró una enfermedad primero, de adultos mayores; ahora hay otros perfiles, los mayores de 40, pero niños y niñas, como se considera que no es letal, no han sido atendidos. Ni siquiera hay información para ellos, por supuesto tampoco una vacuna", comentó.

PEQUEÑOS, VULNERABLES Y BLANCO DEL CRIMEN

Durante el confinamiento, alertó Pérez García, se presentó un aumento en ciertos delitos hacia los más pequeños, como abuso sexual y corrupción de menores.

Las últimas estadísticas dan cuenta de que en medio de la pandemia hubo siete homicidios y siete desapariciones de niñas, niños y adolescentes, de acuerdo con el especialista.

Alvaro "N", acusado de violar a una menor de 10 años, en Atlacomulco
Alvaro "N", acusado de violar a una menor de 10 años, en AtlacomulcoCaptura de pantalla
José Eliud "N", investigado por abuso sexual en agravio de su hijo menor de edad.
José Eliud "N", investigado por abuso sexual en agravio de su hijo menor de edad.Captura de pantalla

DESNUTRICIÓN Y DESERCIÓN ESCOLAR

Los daños colaterales por esta enfermedad contagiosa también quebraron el poco apoyo que recibían los menores de edad cuyo sustento depende del Gobierno, en una extensa temporada en el que los comedores comunitarios y escuelas de tiempo completo dejaron de dar servicio.

"Todos los niños y las niñas que dependían del alimento que se daba en estos programas quedaron sin estos apoyos, de tal suerte que vamos a tener problemas de alimentación, una crisis alimentaria" para una parte importante de la población, advirtió Pérez García.

En el caso, por ejemplo, de los menores que asistían a la escuela se percibió además un retroceso de 40 años "al tener niños que (tienen clases) por televisión cuando el mundo entero está avanzando en la educación en línea”.

La propia Secretaría de Educación Pública reconoce que ha perdido contacto con 15 por ciento de la población estudiantil; esto podría representar que en la educación básica, de los cerca de 30 millones de estudiantes inscritos, de 4 a 4.5 millones de niños y niñas estén abandonando la escuela

Juan Martín Pérez / Redim

TIRO DE GRACIA A LOS ORFANATOS

Poco se habla de los menores en casas hogar o de asistencia social en esta cruda temporada. Desde marzo pasado, cuando el Gobierno federal declaró activa la Jornada Nacional de Sana Distancia, orfanatos de todo el país optaron por solicitar apoyo a la sociedad para no dejar sin oxígeno a niñas y niños sin familia, muchos en contextos marcados por la violencia o el maltrato.

Casas hogar buscan donaciones de la sociedad civil para mantener a niños bajo su tutela
Casas hogar buscan donaciones de la sociedad civil para mantener a niños bajo su tutelaCuartoscuro

Dulce María Mejía, directora de Protección y Restitución de Derechos de la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (SNDIF), explicó a La Razón que si bien las actividades en casas hogar no se han visto afectadas por la contingencia, los procedimientos de adopción se ralentizaron.

Las visitas cara a cara, que son vitales para establecer un vínculo entre los niños y sus posibles padres tuvieron que ajustarse al formato de entrevistas vía Zoom o correo electrónico.

Además, el constante cambio de color del semáforo epidemiológico que mantiene en vilo a algunas entidades del país, causa estragos en los juzgados familiares que no pueden brindar atención con normalidad, lo que retrasa los procedimientos de adopción.

"En el DIF continuamos con todo nuestro trabajo, tuvimos que adaptarnos a esta nueva normalidad. Se agilizaron los procesos a través de videoconferencias, revisión de documentos a través de correos electrónicos”, justificó la funcionaria.

"No tuvimos complicación de los procedimientos que se realizan dentro del sistema, pero sí nos vemos mermados —cuando estamos en semáforo rojo— el tema de los juzgados familiares donde se lleva a cabo la jurisdicción voluntaria. Tiene que ser delante de un juez y se cierran, entonces nos quedamos a la espera incluso de algunos otros trámites", admitió.

Esta misma situación ocurre los registros civiles u oficinas de pasaportes —para las adopciones internacionales—, cuyas labores no terminan de reanudarse por completo.

PESE A LOS DESAFÍOS, MÁS DE ELLOS ENCONTRARON UN HOGAR

Con todo y los cambios en la manera de llevar a cabo adopciones en nuestro país, durante 2020 aumentó la cantidad de adopciones concretadas respecto a los años previos.

Adopciones 2020.
Adopciones 2020.Armando S. Armenta/La Razón

De acuerdo con información a la que La Razón obtuvo acceso por medio de una solicitud de transparencia al Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (SNDIF), el año pasado se concretaron 23 adopciones, 17 más que en 2019 previo a la contingencia.

Además, esta cifra fue significativamente más alta en relación con los últimos cinco años, en los que se concretaron apenas entre seis y 15 adopciones anualmente.

El dato es relevante al considerar que en 2020 la dependencia recibió 33 solicitudes de adopción; esto quiere decir que se concretó 69 por ciento de los casos. Un año previo, en 2019 se recibieron 32 solicitudes, pero apenas se concluyeron los trámites de seis.

Durante el 2020, 185 niños, niñas y jóvenes sin padres o tutores, permanecieron en alguna casa hogar del DIF.

ATENCIÓN PEDIÁTRICA DISMINUIDA

La saturación en los sistemas de salud estatales y del Gobierno federal también afectó la atención pediátrica. Uno de los sectores mayormente afectados es el de menores con cáncer, quienes ya arrastraban problemas de años previos por el desabasto de medicamentos.

Para ellos, se apiló la falta de sitios para recibir atención en hospitales, sin contar el elevado riesgo de contagiarse de COVID al que se enfrentan al padecer alguna enfermedad crónica.

Israel Rivas, padre de Danna, una menor con cáncer, contó a La Razón que durante los últimos meses no sólo no se ha solucionado el problema de desabasto, la llegada de la pandemia aumentó el temor de cientos de padres de familia de todos los estados, quienes a lo largo de los casi 12 meses desde el primer caso detectado de COVID en México, continúan manifestándose en las calles para exigir apoyo, pese a los riesgos.

No se ha avanzado nada. Sigue habiendo falta de medicamentos y ahora está peor porque además hay temor y miedo hasta de salir a protestar por esta pandemia

Israel Rivas / Padre de Danna (niña con cáncer)

Al tema de desabasto se suma la falta de una estrategia de vacunación para niños que padecen comorbilidades, pese a que su riesgo de contraer el virus y de padecer un cuadro mortal, se eleva por su condición de salud.

"Cuando comenzó la pandemia se dijo que el cubrebocas sólo lo debería de utilizar el personal de salud, que no servía para las personas normales, y luego resultó en una falsedad. Se dijo así porque no había suficientes”, dijo.

“Con la vacuna está pasando exactamente lo mismo. Dicen que no se puede usar en niños porque no hay pruebas (de su uso), pero el fondo es porque no hay suficiencia de vacunas. Entonces están sacrificando a niños y con comorbilidades o enfermedades crónicas. Eso es tremendo", lamentó.

Dicen que (la vacuna antiCOVID) no se puede usar en niños porque no hay pruebas (de su uso), pero en el fondo es porque no hay suficiencia de dosis. Entonces están sacrificando a niños y con comorbilidades o enfermedades crónicas. Eso es tremendo

Israel Rivas / Padre de Danna (niña con cáncer)