Tripulantes de la Flotilla Global Sumud

“Nosotros volvimos, pero Gaza sigue allí”: mexicanos repatriados

A su retorno al país, los seis activistas señalan que la situación que vive Palestina “es horrible”; son recibidos en el aeropuerto capitalino por el canciller Juan Ramón de la Fuente

Los activistas mexicanos, ayer, a su llegada al aeropuerto capitalino.
Los activistas mexicanos, ayer, a su llegada al aeropuerto capitalino. Foto: David Patricio

El reloj marcó las 08:14 horas de este miércoles. Las lágrimas, aplausos y el eco de la canción “Bella Ciao” fueron la forma en que activistas pro-Palestina y familiares recibieron a los seis integrantes mexicanos de la Flotilla Global Sumud, cuando cruzaron las puertas del aeropuerto con los rostros cansados tras un largo viaje de vuelta, pero con la convicción intacta.

La alegría de volver a casa la transmitieron al mandar besos al aire al ver a sus amigos y familias, levantaron el puño en señal de que su lucha no ha terminado. De acuerdo con sus testimonios, luego de que fueran interceptados por soldados israelíes, sufrieron días de encierro, golpes y tortura bajo custodia de ese gobierno. Volvieron al país, pero su mensaje fue claro: “no se trata de nosotros, sino de Gaza”.

Fueron más de 70 activistas quienes acompañaron la llegada de Sol González Eguía, Ernesto Ledesma Arronte, Arlín Medrano Guzmán, Carlos Pérez Osorio, Diego Vázquez Galindo y Laura Alejandra Veléz Ruiz Gaitán.

  • El Dato: La ONG Global Sumud denunció que el ejército de Israel interceptó este miércoles varios de sus navíos que llevaban nueva ayuda humanitaria para la Franja de Gaza.

Desde las 06:00 de la mañana, a la puerta E3 de la terminal 1 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) arribaron activistas y familiares con la bandera palestina y gritos de “¡Palestina vencerá desde el río hasta el mar!”.

A su llegada, Diego Vázquez Galindo se detuvo frente a la puerta con su barba tupida y cabellos desaliñados provocados por las más de 24 horas de viaje desde Jordania, haciendo escala en Estambul, Turquía, para llegar a México. Su voz tembló, pero no por miedo: “Esto no es sobre nosotros. Se trata de los niños y niñas de Gaza, de cómo los matan, de cómo, incluso con muletas, siguen bailando”.

Pidió a los mexicanos ver más allá del regreso de ellos a su tierra y que “investiguen las empresas israelíes que venden tecnología en México y presionen para romper relaciones comerciales con un Estado sionista”.

  • 24 horas duró el viaje desde Israel, con dos escalas
  • 70 personas recibieron a los activistas en el AICM

Luego contó que, desde la celda en la que estuvo recluido, escuchaban el sonido de las bombas cayendo sobre Gaza. “Es el mismo sistema que mata a 11 mujeres al día en México. Estar en Gaza también es luchar por ellas”.

Una de las activistas más jóvenes que participó en esta travesía, Arlín Medrano, dijo: “Tenemos el privilegio de no haber nacido en Palestina. Allá muere un niño cada nueve minutos”.

Contó que en la celda que ocupó en el centro de detención de Ketziot, las paredes estaban llenas de nombres y marcas de prisioneros que llevaban años sin sentencia. “Regresamos, tenemos cámaras y voz, pero allá siguen sin justicia”, dijo.

Mientras que Laura Vélez Ruiz, también integrante de la flotilla, destacó que la travesía fue impulsada “por la gente común, por quienes creemos que el cambio es colectivo” y denunció que “a estas alturas del siglo XXI todavía existan bloqueos a la ayuda humanitaria”.

Visiblemente afectada, Sol González Eguía recordó el encierro: “Estuvimos en las entrañas del monstruo. Un policía, burlón, nos dijo que esa cárcel era de cinco estrellas”. Pausó, respiró, y remató: “Fuimos secuestradas. Pero el horror que vive Palestina es insostenible”.

Los activistas mexicanos, ayer, a su llegada al aeropuerto capitalino.
Los activistas mexicanos, ayer, a su llegada al aeropuerto capitalino. ı Foto: David Patricio

“Sufrimos tortura psicológica y física. Además de ser un acto ilegal, fuimos secuestradas y encerradas. Y aun así, Palestina sufre algo insostenible. La Flotilla es quien habla en tierra, quien denuncia, que habla del tema”, insistió.

El documentalista Carlos Pérez Osorio expresó su pesar por no haber logrado llegar a Gaza, aunque destacó que el mensaje humanitario que llevaron “retumbó con fuerza”. Reconoció el respaldo brindado por la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) para facilitar su regreso a México, pero relató que durante su detención fueron víctimas de malos tratos.

“Fuimos maltratados, pero nunca rompieron nuestro espíritu ni sentimos miedo. Agradezco a mis compañeros y compañeras que mantuvieron viva la causa y la misión. Debemos seguir hablando de Gaza”, aseguró el cineasta, quien insistió en que la voz de la flotilla logró trascender pese a la represión sufrida.

Antes de retornar a casa, Diego Vázquez volvió a hablar: “Nos dejaron sin comida, sin agua, sin medicinas. Pasé síndrome de abstinencia, pero nada de eso se compara a lo que viven los palestinos cada día”; pero advirtió con convicción: “Si mañana sale otra flotilla, volveré a ir”.

Antes del recibimiento familiar, los recién llegados fueron recibidos en la Base Aérea Militar del AICM —el antiguo hangar presidencial— por el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Juan Ramón de la Fuente, quien reafirmó que su prioridad es velar por la integridad física y los derechos de las y los connacionales en el exterior hasta su retorno seguro a nuestro país.

En el sitio además de reunirse con sus familiares, se les realizó una revisión médica y se llevó a cabo su trámite migratorio. Los activistas agradecieron la intervención de la

Cancillería, que estuvo a cargo de los gastos de repatriación, y del personal diplomático que gestionó su retorno, para que pudieran regresar a salvo a casa.

Consultada en conferencia de prensa sobre si recibirá a los connacionales ahora que llegaron al país, la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo mencionó que aún no se le ha hecho la solicitud, pero de presentarse, se reuniría con ellos.