En caso Iguala descartan un solo punto de desaparición

Familiares de los 43 normalistas de Ayotzinapa aseguraron que los estudiantes nunca estuvieron juntos durante su desaparición, la noche del 26 y 27 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero, ya que fueron repartidos en grupos pequeños.

“Nosotros nunca creímos lo que dijo la ‘Verdad histórica’, de que estaban todos muertos e incinerados en el basurero de Cocula; nosotros dijimos desde el inicio que habían sido separados en grupos, pero estamos en espera de que la Fiscalía General de la República nos confirme todo para tener totalmente certeza”, destacó a La Razón, Felipe de la Cruz, vocero de los familiares de los 43.

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Señaló que a los estudiantes se los llevaron desde diferentes puntos, como el Puente El Chipote, la avenida Juan N. Álvarez y otros sitios que tienen identificados; por ello, explicó: “es una realidad que en caso de encontrarse (los restos), no se haría de manera conjunta, sino por separado”.

“Nunca creímos lo que dijo la ‘Verdad histórica’ de que estaban todos muertos e incinerados en el basurero de Cocula; nosotros dijimos desde el inicio que habían sido separados en grupos”

Felipe de la Cruz

Vocero de los familiares

Durante una caminata que realizaron padres y madres desde la Glorieta de Peralvillo a la Basílica de Guadalupe, el abogado de los familiares, Vidulfo Rosales, reiteró que las nuevas investigaciones en el caso detallan que no hubo un “punto único” en la desaparición de los jóvenes, pues el análisis de las 10 mil llamadas asegura que fueron repartidos en la noche de los hechos.

Además, señaló que, aunque se tiene la esperanza de encontrarlos vivos, es probable que 90 por ciento de los hallazgos sean en fosas.

“Los datos que ahora se tienen es que pudieron haber sido divididos en varios grupos y su paradero puede ubicarse en diferentes municipios aledaños a Iguala”, dijo.

Vidulfo Rosales adelantó que habrá una reunión con el titular de la FGR, Alejandro Gertz Manero el próximo 8 de enero y dos días después, el 10 de enero, con el Presidente Andrés Manuel López Obrador, de quien esperan resultados, pues señaló que abril es el mes acordado para que la autoridad federal tenga indicios sobre el paradero de los estudiantes, tras analizar las llamadas telefónicas que se realizaron esa noche entre los presuntos responsables y desde los celulares de los normalistas, mismos que fueron recuperados después.

“Los datos que ahora se tienen es que pudieron haber sido divididos en varios grupos y su paradero puede ubicarse en diferentes municipios aledaños a Iguala”

Vidulfo Rosales

Abogado del caso

En este tenor, el vocero explicó que las líneas de investigación del paradero de los jóvenes se centran en cinco municipios: Huitzuco, Cocula, Tepecoacuilco, Taxco e Iguala.

Añadió que a pesar de que el tiempo está encima, no hay punto crítico, aunque desean que la información se dé lo más pronto posible, pues ya son cinco años sin resultados. “No hay punto crítico como tal, porque éste fue desde la desaparición de los jóvenes, pero sí queremos que en cualquier momento nos den un avance para llegar a la verdad”.

El dato: Durante la misa, el obispo Salvador Rangel lamentó los pocos avances en el caso, el cual, afirmó, es “una llaga que llevamos en México y que no cerrará hasta conocer la verdad”.

De la Cruz reconoció que en este Gobierno hay voluntad política para encontrar la verdad, por lo que hizo un llamado a que se aplique la ley “caiga quien caiga”, incluido el exprocurador Jesús Murillo Karam, por obstruir las pesquisas con la “Verdad histórica”.