Hospital Infantil, sin desabasto: AMLO

El Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que en el Hospital Infantil de México Federico Gómez no hay desabasto de medicamentos, como el vincristina, un fármaco de quimioterapia que se administra a menores con cáncer; sin embargo, reconoció que se enfrentan presiones de la empresa PISA, la farmacéutica que controla el mercado.

En su conferencia matutina en Palacio Nacional, dijo que la Secretaría de la Función Pública (SFP) continuará con la investigación de los contratos de proveedores de estos medicamentos, como informó la dependencia federal este jueves.

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“Se están atendiendo a los niños, no hay desabasto de medicamentos. El director del hospital quiere participar, colaborar. De todas maneras, la Secretaría de la Función Pública va a hacer la investigación sobre el contrato”, agregó.

El mandatario federal también aseguró que terminará con la subrogación de servicios en las farmacias de los hospitales, principalmente de medicinas para el tratamiento de cáncer.

Informó que el director de ese Hospital Infantil de México, Jaime Nieto Zermeño, aceptó brindar servicios de salud gratuitos. “Dejar de manifiesto la gratuidad se tiene que cumplir, ya en este hospital el director aceptó que se va aplicar”, aseguró López Obrador.

El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, informó que tras el recorrido que autoridades de la Secretaría del ramo realizaron este jueves por el Hospital Infantil de México, constataron que sí recibió el fármaco vincristina, el cual se usa para quimioterapias.

Precisó que las instituciones de salud no tienen la capacidad para determinar con certeza cuánto medicamento les falta, porque eran sus proveedores quienes se hacían cargo de esa tarea, debido a los contratos de tipo integral, como el que tenía el Seguro Popular, al administrarlos a las farmacias localizadas en los nosocomios.

“Los institutos nacionales de salud y demás hospitales que tienen este modelo de contrato de farmacia integral, están atados a estos contratos; de tal suerte que las compañías tienen la producción de medicamentos, la central de mezclas y la distribución de medicamentos, y operan la farmacia que se encuentra físicamente dentro de estos hospitales públicos. Esto lo que hizo es que las instituciones públicas se desentendieran de toda la trazabilidad y la administración de los medicamentos”, aseveró.

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López-Gatell Ramírez dijo que dichos contratos significan “una especie de privatización, en los hechos, de los servicios de salud”, al trasladar las funciones de administración a la compañía privada.

Esta administración, agregó, trabaja en dos ejes:  transformar el sistema de salud, y que los hospitales tengan una reserva de medicamentos oncológicos, como el metotrexato, que sustituya a los fármacos cuando la empresa privada no responde bajo contrato.