Caso Norberto: secuestro, cobro y hallazgo del joven, en radio de 8 km.

La última vez que el estudiante Norberto Ronquillo fue visto con vida fue afuera de la Universidad del Pedregal, ubicada en Avenida Transmisiones 51, colonia Exhacienda San Juan Huipulco, alcaldía Tlalpan. Según su último mensaje de texto, enviado a su novia, se dirigía a casa de sus tíos, donde residía, en Coapa, Coyoacán.

La familia pagó el rescate solicitado por secuestradores en un autolavado ubicado en la zona de Cafetales, delegación Tlalpan. Y después de seis días su cuerpo fue hallado en una zona agreste, en Xochimilco, también en el sur de la ciudad. Según habitantes de Santa Cruz Acalpixca, zona conocida como El Pirul, no es la primera vez que abandonan cadáveres ahí.

De acuerdo con el señor Miguel, vecino de la zona, al tratarse de un lugar de difícil acceso y boscoso es común que se preste para que grupos de delincuentes operen en el lugar y abandonen cuerpos que “regularmente los avientan entre la terracería, porque ahí es más difícil que los encuentren”.

En el mismo sentido se expresó la señora Rocío, otra habitante de la alcaldía, quien aseguró que los vecinos prefieren no acercarse a la zona, pues “luego no sabe uno lo que se puede encontrar”.

Por su parte, Leonel, también residente, señaló que hace varios años “esos caminos” eran seguros, pero que en los últimos tiempos ya no pueden caminar libremente por ahí a causa de la inseguridad y ya “ni las patrullas entran a cuidarnos”.

Aseguró que apenas hace dos años fue encontrado otro cuerpo en la misma zona, por lo que refirió que ya no sorprendería si ocurrieran otros hallazgos similares.

Al respecto, la titular de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PGJCDMX), Ernestina Godoy, informó que por el avanzado estado de descomposición en el que se encontraba el cuerpo al momento de su ubicación se presume que pudo haber sido asesinado la misma noche en la que fue plagiado.

El hallazgo del cadáver del joven de 22 años se logró tras una denuncia anónima recibida en el número 911 después de las 20:00 horas del domingo.

“Se informa de la ubicación de un cadáver, se acude al lugar y se localiza en una bolsa; es hasta que llegan los peritos cuando se presume que es el joven. Ha sido reconocido por la ropa al filo de la madrugada. Ahora se está llevando la necropsia que es la que dará datos más certeros de la causa de la muerte y el tiempo que llevaba el cadáver en ese lugar, pero por el avanzado estado de descomposición que tiene, podríamos haber estado hablando de (que el homicidio ocurrió) esa misma noche”, explicó en conferencia Godoy Ramos.

Más tarde, en el Instituto de Ciencias Forenses (Incifo), Norelia Hernández, madre de Norberto, adelantó que las cenizas de su hijo serán trasladadas a Chihuahua, de donde era originario.

El pasado 4 de junio, Norberto salió a las 21:30 horas de la Universidad del Pedregal a bordo de un automóvil Toyota Yaris; en la última imagen que se tiene de él, captada por las cámaras de vigilancia del campus, se observa mientras escribía a su novia que iba a casa de sus tíos, a donde ya no llegó.

Pocos minutos después, sus familiares recibieron una llamada para anunciarles que se trataba de un secuestro y exigían cinco millones por la liberación. Mientras los padres y tíos del estudiante juntaban dinero, uno de sus primos denunció los hechos ante la Fiscalía Antisecuestro de la Procuraduría capitalina.

A las 3:00 horas del miércoles, la familia arrojó 500 mil pesos, entre efectivo y alhajas, en el punto pactado, frente al Autolavado Sifón, en Calzada de las Bombas 799. Media hora después, su primo arribó a la esquina de Piraña y Chalco, en la Colonia del Mar, alcaldía Tláhuac, donde el joven supuestamente sería liberado, lo cual no ocurrió.

Ese mismo día se dio inicio al protocolo antisecuestro, pero fue hasta el viernes cuando la procuradora Godoy recibió a la familia de Norberto y les garantizó que implementaría las acciones necesarias para localizarlo.

El Dato: Apenas en octubre del año pasado, bomberos, policías y habitantes de Santa Cruz Acalpixca que buscaban a un niño desaparecido encontraron flotando en un canal el cadáver de un adulto.

Con información de Iván Mejía

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