Migrantes dejan Estadio Palillo, pero otras caravanas avanzan

Los últimos 650 migrantes que estaban en el Estadio Jesús Martínez Palillo en la Magdalena Mixhuca, en la Ciudad de México, fueron trasladados a un edificio de la Arquidiócesis en la calle San Lorenzo, Tepeyac, por unos días.

“Son 650 personas, la mayoría salvadoreños; 80 niños y 250 mujeres. Se les traslada en 20 autobuses a la Casa del Migrante y ahí, depende de lo que resuelva el padre Solalinde, que es quien los trae”, aseveró Nashieli Ramírez, comisionada de Derechos Humanos capitalina.

El traslado, según la ombudsperson, fue porque el estadio tiene capacidad para seis mil personas y están al 10 por ciento de ésta, lo que “conlleva a problemas operativos. Lo otro es el frío; por más que estén las carpas, el frío está muy fuerte y necesitábamos un lugar techado”.

Además, organizaciones civiles pidieron a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos interceder para evitar expulsiones colectivas y que garantice el derecho de pedir refugio, luego de que la primera caravana, que está en TIjuana, ingresó sus solicitudes y está a la espera de que respondan, según la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).

Las procuradurías de Derechos Humanos de Guatemala, El Salvador y Honduras solicitaron adoptar medidas de protección a los centroamericanos.

En tanto, la mayor parte de la segunda, se localiza en el municipio de Zapotlanejo, donde esperan seguir por Nayarit, Sinaloa, Sonora y Baja California; a éstos, se les unieron tres camiones con 180 personas que salieron de la Ciudad de México el jueves pasado; mientras que una cuarta se dirige a Puebla y la quinta salió ayer de El Salvador para seguir el camino hacia Estados Unidos.