Prevén expertos guerra de videos de cara a comicios

Analistas políticos aseguraron que la guerra electoral ya comenzó con las constantes filtraciones de videos, imágenes y audios en redes sociales; por ello, la judicialización de la política mexicana se suma a una crisis sanitaria y económica que únicamente creará hartazgo entre los habitantes del país, alertaron.

Ulises Corona, analista político de la UNAM, dijo que pronto estaremos viendo más filtraciones de los actores que desean conservar el poder y que aumentarán a medida que pasen los meses.

“Vamos a seguir viendo dimes y diretes, filtraciones y demás suciedad política, lo que es una crisis política; los políticos no van a entender porque es la manera en cómo hacen su trabajo y eso lo único que provoca es que se desvíe la atención de los temas verdaderamente importante, como lo será el rebase de los 60 mil muertos por Covid-19”, dijo.

A su vez, Francisco Javier Jiménez, politólogo de la UNAM, manifestó que la práctica de mostrar videos es añeja y sólo se está regresando a la actualidad, lo que confirma que los tiempos electorales arrancaron con descalificaciones.

“Este momento de los videos significa la utilización de nuevas estrategias dentro de la competencia político-electoral, para desacreditar a los adversarios y todos los partidos los van a estar utilizando. Los estaremos viendo en los siguientes meses de manera recurrente”, precisó.

Por su parte, José Fernández Santillán, politólogo e investigador de la Universidad de Harvard, dijo que es parte de la guerra sucia entre partidos políticos, pues son proyectiles que se están lanzado entre agrupaciones políticas.

“Morena tiene puntos vulnerables, a pesar de que se ha dicho que son diferentes, pero van a seguir saliendo videos o imágenes con el paso de los meses. Esto es parte de una guerra electoral en la que debería prevalecer la disputa de ideas o propuestas, pero desgraciadamente es una guerra de lodo”, explicó.

Los tres coinciden en que los partidos que deseen llegar a la carrera política del siguiente año, comenzarán a elevar la tensión de las declaraciones, pues en este momento el caso Lozoya sólo es un pretexto político.